Sala de prensa Presidencia de la República...
CIUDAD DE MÉXICO. Discurso del Presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Muy buenos días, amigas y amigos.
Muy estimados Secretarios, Procurador.
Muy estimados Subsecretarios, directores, servidores públicos.
Muy estimados empresarios.
Muy estimados integrantes de las organizaciones de la sociedad civil.
Muy estimados líderes de trabajadores e integrantes de nuestro México.
Muy buenos días a todos.
Hoy se cumplen cuatro años del Gobierno, de esta Administración Pública. Han sido cuatro años muy, muy intensos y también muy productivos.
Yo quiero, en primer lugar, agradecerle a todos mis colaboradores, desde los Secretarios, aquí presentes, hasta el último y más sencillo de los trabajadores al servicio de México, hasta la última de las secretarias, de las afanadoras, de los soldados, de los marinos, de los policías, de los médicos, de las enfermeras, de las maestras, de los maestros, a todos los que han hecho posible el trabajo que hemos concluido en este Cuarto Año de Gobierno.
Y que ha sido muy productivo. Un año que ha sido de retos, de dificultades, pero también de realizaciones. Y como es evidente, se impone, también, hacer un balance, un balance objetivo, no carente, desde luego, de apasionamiento por los temas y los retos que hemos vivido, pero también sustentado en elementos objetivos, como podrán ver a continuación.
El objetivo de esta reunión, además, no es sólo presentar gráficamente lo que hemos hecho y lo que falta por hacer, sino también poder hacer un ejercicio de diálogo hasta donde ello sea posible con todos ustedes.
Y quiero referirme a la materia de Gobierno, en base a los cinco ejes fundamentales que siempre, siempre, estuvimos proponiendo a la sociedad antes de las elecciones del 2006, y que esos cinco ejes también constituyeron, no sólo los ejes del Plan Nacional del Desarrollo, sino incluso del proyecto de gran visión para nuestro México.
Son: Estado de Derecho y Seguridad Pública, Economía Competitiva y Generadora de Empleos, igualdad de oportunidades para Todos, Desarrollo Sustentable y, finalmente, Democracia Efectiva y Política Exterior Responsable. Déjenme empezar con cada uno de esos temas.
Primero. Estado de Derecho y Seguridad Pública.
Tiene, como su nombre lo indica, dos objetivos fundamentales: el Estado de derecho, que es refrendar a México como un país de leyes e instituciones. Es el objetivo medular de la acción de Gobierno en esta materia, que México sea un país de leyes, donde se respeten los derechos de las personas, donde se respete la ley, y que esa certidumbre nos permita, precisamente, una vida mejor, que esa certidumbre permita que haya más inversiones, y que la gente pueda vivir en paz.
Y en el Estado de Derecho y seguridad pública, el segundo objetivo es éste, que es la seguridad de los mexicanos, proteger la vida, proteger el patrimonio, y proteger la integridad de las familias mexicanas, que hoy, en nuestro México, están amenazadas, evidentemente, por los criminales. Yo aquí quiero hacer un primer énfasis.
La responsabilidad de la violencia y de la criminalidad es de los criminales. Es una perspectiva que no puede perderse de vista, es una perspectiva que debe enfatizarse una y otra vez. La responsabilidad de la violencia es de los violentos, la responsabilidad del crimen es de los criminales, y no de las autoridades, que nos decidimos a combatir a esos criminales.
Cuáles han sido los componentes de una estrategia, que además es una estrategia integral, que hemos puesto en marcha.
No ha sido sólo una estrategia enfocada a la parte policiaca, o de cumplimiento forzoso de la ley, sino que es una estrategia que tiene varios componentes.
El primero es enfrentar a la delincuencia. Es decir, el componente que tiene que ver con los operativos en apoyo a las autoridades locales y a los ciudadanos. Si algo ha quedado evidente en nuestro México es la debilidad, la vulnerabilidad de muchas de las instancias locales en el país, particularmente policías municipales, por las razones que se quiera. Por la debilidad institucional que se ha generado a lo largo de los años, por la intimidación que los criminales y la presión que ejercen sobre las propias autoridades, por temor, por complicidad, también, quizá.
Por cualquier razón. El hecho es que las estructuras de cumplimiento de la ley, tanto en materia de seguridad como en procuración de justicia en el país, a nivel municipal y a nivel estatal, no cuentan en muchas partes del país con la capacidad, no cuentan y muchas no contaban más con la capacidad para hacer frente al crimen.
No obstante que más del 90 por ciento de los delitos que se cometen en el país, son delitos del orden común, por ejemplo, el robo, la extorsión, el secuestro, incluso, el propio homicidio.
La labor que se está realizando en la República Mexicana ha sido una labor fundamentalmente impulsada por el Gobierno Federal, con el apoyo invaluable e insustituible de las instituciones y, particularmente, de las Fuerzas Armadas, que de acuerdo con el mandato constitucional tienen por fin no sólo preservar la soberanía exterior, sino también la seguridad interior del país.
El segundo elemento es escalar las capacidades técnicas, operativas, del Estado mismo, de las Fuerzas del Estado para hacer cumplir la ley.
El tercer elemento es una reforma integral al marco legal e institucional del país.
El cuarto elemento es una política activa de prevención del delito de carácter fundamentalmente social.
Y el quinto elemento ha sido fortalecer la cooperación institucional.
Cómo vamos en cada uno de estos elementos.
Déjenme darles visualmente algunos resultados que se han obtenido, comparados con otras Administraciones, precisamente, en lo que hemos logrado, en lo que se ha logrado; fundamentalmente por las Fuerzas Armadas y la Policía Federal.
Ustedes pueden ver comparativamente algunos indicadores. Por ejemplo, el decomiso de metanfetaminas, ustedes pueden ver 20 toneladas, comparadas con una, dos, que en el mismo periodo, en Administraciones anteriores se decomisaban.
El decomiso de dinero, que son las barras verdes, el avance más importante que había tenido la Administración anterior, 407 millones de pesos; hemos decomisado ahora casi cinco mil 500 millones de pesos de los criminales.
O bien lo que se ha decomisado en vehículos de los criminales. Ustedes pueden ver, voy a dar simplemente los datos finales, 40 mil vehículos decomisados en cuatro años a la criminalidad.
O si medimos aeronaves, por ejemplo, desde avionetas, helicópteros, algunos jets. En fin. Hemos decomisado en estos cuatro años casi 500 aeronaves al crimen organizado en el país, comparativamente, como ustedes pueden ver, muy por encima de lo que se había logrado, hasta ahora, en nuestro México.
También, obviamente, los decomisos de armas, que ha sido un problema medular que hemos encontrado, la capacidad logística de los criminales, que es una parte importante de esta ecuación.
En cartuchos, por ejemplo, se han decomisado casi 10 millones de cartuchos. Diría yo que son, por lo menos, cinco veces más de lo que se decomisaba en otras Administraciones. De granadas, lo que se decomisó entre el 2000 y el 2004 fueron 107 granadas en todo el país; hoy hemos decomisado más de 10 mil granadas, mil veces más; cien veces más granadas en este periodo, más de 10 mil granadas.
De armas son 93 mil, de las cuales la mayoría son armas de asalto, básicamente AK-47, R-15, armas muy peligrosas en poder de los criminales que serían suficientes, quizá, para poder armar un ejército en muchos, muchos de los países de América Latina o de África, o de Asia.
También, se ha dicho, amigas y amigos, que el Gobierno Federal, las Fuerzas Armadas, la Policía Federal no actúa contra todos los cárteles y eso es absolutamente falso, como ustedes podrán ver en esta gráfica que tienen en la pantalla.
Se está combatiendo con firmeza a todas las organizaciones criminales. Si analizamos la gente que ha sido detenida, desde algún vendedor narcomenudista, hasta los grandes capos, ustedes pueden ver, perfectamente, que la acción ha sido equilibrada y que las detenciones obedecen, precisamente, a la proporción de agresiones a la sociedad y comisión de delito de los criminales y de los cárteles.
El porcentaje, los que están en azul, por ejemplo, del lado izquierdo viendo a la pantalla, es Golfo-Zetas, el 28 por ciento; al Cártel del Pacífico, el 24 por ciento de los detenidos; está, también, el Cártel de los Beltrán Leyva, que, también, durante la mitad de estos cuatro años fue parte del Cártel del Pacífico, 15 por ciento; está el Cártel de Tijuana, el Cártel de Juárez, el Cártel de La Familia, etcétera. A todas las organizaciones se les ha combatido y a todas se les ha golpeado contundentemente.
Y lo mismo podríamos decir de líderes capturados o abatidos de esas organizaciones, de todos. Desde, precisamente, El Tony Tormenta, del Cártel del Golfo; hasta Ignacio Coronel, del Cártel del Pacífico, y en medio, desde luego, una gran cantidad de líderes de todas las organizaciones, desde La Barbie o El Grande, o bien El Rey Zambada o Vicente Zambada, en fin, y El Teo.
Y si se siguiera, digamos, la lista de líderes de las organizaciones criminales que se han capturado en estos años de Gobierno, ha sido la mayor captura de jefes criminales que haya tenido el país.
Yo sé que faltan muchos más, pero no cabe duda, amigas y amigos, que en esta Administración se ha capturado al mayor número de líderes poderosos de las organizaciones criminales. Y no sólo eso, sino a todos los niveles de la estructura criminal: financieros, sicarios, vendedores, toda la operación está siendo combatida.
Algo muy importante ha sido el apoyo que las Fuerzas Armadas y la Policía Federal han brindado a la población. Cito un ejemplo: hace unos días, durante todo este año básicamente, yo invito a que participen todos los que quieran, interesados en el tema, en la Mesa con el Gabinete de Seguridad, que también va a haber aquí para dialogar. La guerra que libran entre sí el grupo de Los Zetas contra el grupo del Golfo ha asolado, por ejemplo, este año a los estados de Nuevo León, de Tamaulipas, parte de Veracruz y San Luis, sobre todo los dos primeros y, en particular, a las zonas fronterizas.
Ha habido, incluso, reportajes alarmantes sobre algunos poblados de la frontera. Por ejemplo, Mier, en Tamaulipas. Inmediatamente de que se tuvo conocimiento de los hechos y en el marco de un operativo contundente que realiza hoy el Gobierno Federal por conducto de las Fuerzas Armadas, y la policía, la PGR, en el Noreste del país; desde la semana pasada se tiene, no sólo desde la semana pasada, se ha tenido siempre, pero la presencia del operativo de las Fuerzas Federales ha sido contundente, y tiene pleno dominio de esa frontera. Incluso, la comisión de delitos se ha abatido significativamente en estos días ahí. Puede, desde luego, haber desde sobresaltos y eventos previsibles, pero es un hecho, la presencia y el dominio de las Fuerzas Armadas ahí.
Y comento este dato, porque no deja de llamarme la atención que cuando eso ocurre en otro país, en las notas de los titulares de los periódicos es: Se rescata la favela de X lugar, dominan los soldados, finalmente; y aquí es cosa clara que hacen, invariablemente, nuestras Fuerzas Armadas, y sé que lo hacen, independientemente del reconocimiento que merezcan de los reportes periodísticos. Así que, mi agradecimiento profundo y sincero, a nombre de los mexicanos, a las Fuerzas Armadas.
Ahora. Estamos trabajando, sí, en los delitos Federales, en el crimen organizado, en el narcotráfico, pero también estamos ayudándole a las autoridades locales a combatir, precisamente, los delitos del orden común.
Por ejemplo, el secuestro, que más agravia a los ciudadanos; el secuestro es el delito que más agravia, creo, a los ciudadanos. El secuestro y la extorsión son, realmente, los que generan la mayor zozobra, el mayor temor y la incomodidad.
No sé si alcancen a ver ustedes las gráficas, creo que sí. Pero en lo que va de esta Administración, entre la Administración Federal, apoyando a las locales, se han capturado más de tres mil 300, casi tres mil 300 secuestradores en todo el país, lo cual también es una cifra récord.
Y algo muy importante, amigas y amigos. Es que el secuestro, muchas veces, va generando, también, replicadores. Muchos de estos delincuentes que hemos atrapado, van replicando lo que van aprendiendo, digamos, colectivamente, en la difusión tan precisa de la comisión de este delito.
Pero el hecho es que no sólo estamos haciendo un esfuerzo enorme, desde el Gobierno Federal, hemos apoyado, precisamente, a las infraestructuras estatales. Tan sólo por sí mismas las Fuerzas Federales han capturado probablemente a unos mil 500 de éstos casi tres mil 300 secuestradores.
Pero algo más importante que eso. Hemos hecho un esfuerzo en el Sistema Nacional de Seguridad Pública, me referiré más adelante, para que cada estado desarrolle algo que la mayoría de los estados no tenían, que son unidades especializadas en el combate al secuestro.
Y nos estamos encargando que no sólo las integren, sino le estamos pasando báscula a los integrantes de esas unidades especializadas en el combate al secuestro, para asegurarnos de que se trata de unidades integradas por gente plenamente confiable.
Ustedes pueden ver los otros datos. Se han liberado cuatro mil 135 víctimas de secuestro y se han desarticulado 613 bandas de secuestradores en todo el país.
Otro dato muy importante, pasando al otro eje de la estrategia de Estado de Derecho y Seguridad Pública, es: la estrategia de fortalecimiento, la estrategia que consiste en escalar las capacidades operativas y tecnológicas de las Fuerzas del Estado.
Pongo un ejemplo, que es el caso de la Policía Federal. La Policía Federal, antes Policía Federal Preventiva, la verdad, estaba integrada con el valioso apoyo del Ejército Mexicano, concretamente con muchos elementos de la Policía Militar, que en caso de ser requeridos, generosamente ayudaban a la propia policía a completar sus labores de seguridad.
Si descontáramos esos elementos más o menos del orden de siete u ocho mil que de policía que se refuerza temporalmente con elementos de armas y que hemos ido sustituyendo paulatinamente, al inicio de la Administración había seis mil 500 policías Federales, incluyendo casi cuatro mil policías de Caminos ahí.
Actualmente, estamos llegando a 34 mil elementos de Policía Federal; es decir, uno de los esfuerzos más grandes, yo creo, que se han hecho en muchos países, para darnos una policía como la que merecen los mexicanos: una policía fuerte, una policía con presencia, una policía preparada, una policía entrenada, una policía capacitada.
Y como explicaré más adelante, también, una policía que nos esmeramos que esté en constante proceso de depuración.
Algo muy interesante que tiene que ver con esta estrategia del Gobierno. Por qué fortalecer a la policía. Porque queremos, precisamente, contar con una policía que no teníamos, que permita que las Fuerzas Armadas puedan tener una acción subsidiaria más clara, que no tengan que estar constantemente haciendo labores que deben hacer, más bien, directamente, las propias policías civiles.
Y con ello ganamos todos, porque el ciudadano, también, gana en seguridad pública, gana el propio Gobierno en poder combinar una acción subsidiaria y de respaldo como las Fuerzas Armadas. Gana, precisamente, el Estado mexicano, porque tiene más capacidad de hacer valer su fuerza.
Un dato interesante. De estos 34 mil policías, no todos son, digamos, personal operativo, desde antimotines hasta policías de acciones de reacción inmediata, sino básicamente lo que se ha escalado son las capacidades técnicas de la policía. Y de estos 34 mil, hay siete mil jóvenes, porque lo son en su abrumadora mayoría, que han sido reclutados con gran cuidado, profesionistas, la mayoría terminada su carrera, que son seleccionados y reclutados para labores de inteligencia. Es decir, de análisis, de información, que es la variable que está marcando la diferencia ahora entre las Fuerzas del Gobierno y los criminales.
Eso ha permitido, por ejemplo, una enorme cantidad de capturas y control de situación que ha sido muy útil. No sólo hemos escalado las capacidades operativas de las fuerzas de la Policía Federal, sino, también, su capacidad tecnológica.
Precisamente, la Plataforma México, que hemos construido, tiene una capacidad para procesar más de 400 millones de registros relacionados con información de seguridad pública, desde nombres, placas, licencias, huellas dactilares, modus operandi, etcétera. 400 millones de registros que están en grandes bases de datos que están alimentando, precisamente, la información con la que se tiene que combatir a la delincuencia.
Les voy a dar, por ejemplo, un dato, por ejemplo, para qué sirve esto. Ustedes saben que asesinaron, por ejemplo, al ex Gobernador de Colima, la semana pasada. Está llevando la investigación la Policía de Colima, pero la Procuraduría General de la República, obviamente, está ayudando a esa investigación.
De una huella dactilar del vehículo donde actuaron los criminales, de la Base de Datos de Plataforma México, de la Policía Federal, pudimos saber quién es la persona que estaba en ese vehículo, y esa persona es un policía del Estado de Colima. Y, por supuesto, que vamos en su búsqueda.
Para eso sirve, precisamente, la tecnología, para investigar delitos y para prevenir los delitos. Y por eso estamos escalando profundamente las capacidades tecnológicas de la policía misma.
Dos mil 600 informes como ése, desde una huella dactilar, un nombre, una firma, un teléfono, son cargados diariamente a la Plataforma México. Las voces, los datos, los videos, en las 32 entidades federativas la Plataforma permite ir agregando datos que al combinarse generan una fuerza poderosa de información y de inteligencia a favor del Estado.
Me dirán ustedes: de qué sirve tener tantos policías si no tenemos confianza en ellos, si no son confiables. Y sirve, precisamente, porque no estamos incorporando descuidadamente a los policías, sino que estamos haciendo una labor muy cuidadosa de verificación de esos policías.
Es decir, no entra cualquiera, no permanece cualquiera. Yo sé que todavía hay muchos policías corruptos. Yo sé que puede haber algunos elementos infiltrados en diversas corporaciones Federales. Pero la clave es tener siempre un filtro permanente trabajando constantemente para depurarlos.
Y en qué consiste eso. En diversas pruebas. A cada elemento de las Fuerzas Armadas de la Policía Federal, empezando por los rangos más altos, del Ministerio Público, de la Procuraduría, estamos haciendo estas pruebas de Control de Confianza.
Consisten, por ejemplo, en un examen socioeconómico, para ver si su patrimonio corresponde al ingreso que ha tenido. En un examen sicológico; obviamente, en un examen físico de la persona.
Uno que es sine qua non, es un examen toxicológico. Si alguien tiene una adicción, precisamente, es impensable que esté actuando en contra de los criminales.
Y también exámenes, por ejemplo, del polígrafo, que la fotografía, si la alcanzan a ver, es de una persona, una mujer, joven, por cierto, que se está haciendo el polígrafo, y que nos permite detectar en un interrogatorio muy cuidadoso, cuándo nos está falseando, o alterando, con una probabilidad bastante razonable, la información de quien es sometido al polígrafo.
Y así, se han realizado pruebas de control de confianza a más de 41 mil elementos de instituciones de seguridad pública y procuración de justicia, un gran número, en miles también, de elementos de las Fuerzas Armadas.
Hablando de éstas, por ejemplo, una de las situaciones que veíamos con preocupación era la altísima tasa de rotación que había en las Fuerzas Armadas.
Era razonable ello, sí. Porque, la verdad, los ingresos del soldado, por ejemplo, el soldado raso, eran extraordinariamente bajos, y todavía, desde luego, lo siguen siendo. Un soldado raso, por ejemplo, aquí, en la Ciudad de México, ganaba aproximadamente, no llegaba, a veces, a los cuatro mil pesos al mes.
Nosotros hemos hecho un esfuerzo enorme, enorme, por elevar el ingreso de los soldados, de los marinos, y lo vamos a seguir haciendo. Y hemos aumentado en casi un 80 por ciento el ingreso del personal de tropa y de marinería en nuestras Fuerzas Armadas.
Y no sólo eso. Estamos acelerando un proceso de prestaciones, e incluso revisando las que tienen para poderlas mejorar, en materia de créditos para vivienda.
Y algo muy importante. Un elemento nuevo en México, una prestación que no se había dado nunca, por lo menos en el sector público, no sé si en el privado, pero es que a las hijas, y a los hijos de los militares, y de los marinos, cualquiera que sea el rango del papá, o de la mamá, en las Fuerzas Armadas, van a tener, y tienen ya, una beca para estudiar la preparatoria y la universidad, en la universidad o preparatoria pública, o privada, que quieran. Tienen la beca para que puedan continuar sus estudios. Se han dado 35 mil becas a la fecha.
El gasto en seguridad, por ejemplo, es un gasto que se ha, prácticamente, duplicado, desde el 2006, al 2012. En 2006 había 57 mil millones de pesos, 57 mil millones, de presupuesto. Y en el 2009-2011, van en 111 mil millones de pesos. Hemos duplicado el gasto en seguridad en tan sólo cuatro años, incluyendo toda la crisis económica, que nos hizo detenernos en el esfuerzo presupuestal, pero hemos hecho un esfuerzo enorme.
Algo que yo quiero llamar la atención. Valdría la pena revisar este mismo esfuerzo en otros niveles de Gobierno. Yo la conclusión que tengo, es que debemos gastar más en seguridad. Sin embargo, en algunas entidades, no en todas, la proporción del gasto público en seguridad no sólo no ha aumentado, sino que ha bajado, con lo cual, evidentemente, no se pueden escalar al mismo ritmo las capacidades de operaciones tecnológicas de las fuerzas de seguridad pública en los estados de la República. Algo hay que hacer y simplemente puntualizo.
Tercer elemento de la estrategia. El marco legal e institucional. No basta esta fuerza operativa, no basta el escalamiento tecnológico. Tenemos que cambiar las leyes y ahí, simplemente, las enuncio como las tienen ustedes en la pantalla.
Cuáles son las iniciativas que ya han sido aprobadas.
La nueva Ley Antisecuestro, que publiqué ayer, que permite, precisamente, entre otras cosas, no sólo establecer penas más severas sino también evitar elementos de preliberación, porque cuesta mucho trabajo agarrar a los criminales para que luego al rato, a la vuelta de un año o dos, nos los liberen, que es lo que está pasando, por cierto. Ese es otro tema que compete al Poder Judicial revisar
Pero por lo pronto el secuestro ya no va a ser materia de preliberación. Va a purgar su condena completa el criminal que atrapemos. Las Reformas contra el narcomenudeo, porque ésta es una responsabilidad no sólo del Gobierno Federal. El narcomenudeo es una responsabilidad que compartimos los estados y la Federación, y todos tenemos que entrarle para combatir este mal, para que las drogas estén lejos de los hijos de las familias mexicanas.
Una nueva Ley de la Policía Federal, una nueva Ley Orgánica de la Procuraduría General de la República, una nueva Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, una Reforma Constitucional al Sistema de Justicia Penal. Esto es muy importante, y va avanzando esta reforma que permitirá pasar de los juicios tradicionales, que son inquisitoriales, donde toda la fuerza la tiene, por ejemplo, el Ministerio Público y que finalmente se generan procesos muy tortuosos, a procesos orales, donde el juez tendrá que presenciar físicamente los testimonios de las partes. Tendrán que desahogarse frente al juez todas las pruebas y tendrán que ser presenciales. Pero hay un elemento fundamental de esta reforma, que es una reforma en beneficio de las víctimas, también, que son la parte, siempre, olvidada del proceso penal.
La Ley de Extinción de Dominio, para pegarles a los criminales donde más les duele, que es en su patrimonio. Y hay otras que he propuesto al Congreso de la Unión y que respetuosamente hemos insistido en que puedan ser revisadas y aprobadas, dada la urgencia que tiene el país en materia de seguridad pública.
La Iniciativa de Mando Único Policial. En la medida que los criminales actúan, no sólo nacionalmente o por regiones, actúan internacionalmente, las policías municipales se convirtieron en los puntos más vulnerables, en el eslabón más débil de la cadena.
Por eso, por ejemplo, muchos criminales actúan contra alcaldes o alcaldesas, porque abusan, digamos, de la vulnerabilidad en que se encuentran y quieren someterlos por corrupción o por intimidación y, finalmente, terminan cumpliendo sus amenazas.
Por eso es importante, entre muchas otras cosas que no abundaré, integrar en fuerzas mucho más compactas, con sistemas internos de movilidad mucho más completos y con métodos de control de confianza mucho más centralizados, policías en cada uno de los estados.
Necesitamos 32 policías estatales muy, muy fuertes y muy, muy confiables, en lugar de más mil 500 policías municipales que están inconexas, descoordinadas y tremendamente vulnerables a nivel municipal. Ojalá se pueda avanzar en este tema.
Presenté, en cumplimiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y en exigencia de algunos partidos de oposición muy importantes en la Cámara de Senadores, una Iniciativa de Reforma sobre Jurisdicción Militar. Nada tenemos que ocultar, ni en materia de derechos humanos, ni en materia de justicia en la acción del Gobierno, de las Fuerzas Federales.
Una Iniciativa de Lavado de Dinero y de Financiamiento al Terrorismo, porque es, precisamente, la enorme porosidad que existe en el país. Caray, si se puede comprar una casa de 10 millones de dólares en efectivo, cómo no van a actuar a sus anchas los criminales. Necesitamos asumir responsablemente, por lo menos un seguimiento elemental del dinero, porque así se podrá descubrir dónde está el dinero sucio y quién lo usa.
Una Reforma a la Ley de Seguridad Nacional, que, también, está pendiente, porque queremos certidumbre para todos, para el ciudadano, pero, también, para el policía, y para el soldado, y para el Gobierno y para el propio criminal, que tenga certeza jurídica todo mundo, que todos sepamos a qué atenernos.
Una Reforma a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos, una Reforma en Materia de Delitos contra la Seguridad Pública y contra la Autoridad; una Reforma en Materia de Delito de Traición a las Fuerzas Armadas, porque, evidentemente, cuando alguien traiciona a sus compañeros, no puede ser simplemente juzgado como cualquier otro que ha actuado en la criminalidad motu proprio, y sin tener el conocimiento y la confianza del cuerpo armado al que perteneció.
Finalmente. Delitos cometidos contra libertad de expresión, para proteger a los periodistas. Todas éstas son iniciativas en materia de seguridad que he presentado al Congreso de la Unión y espero, respetuosamente, que puedan ser analizadas, discutidas, modificadas si es necesario, pero, finalmente, aprobadas porque las necesitamos.
Un cuarto elemento. Una política activa de prevención del delito. Qué estamos haciendo básicamente. Tengo que ir más rápido, en materia de prevención. Primero, estamos rescatando espacios públicos.
Yo sé que eso le toca al Presidente Municipal. Pero, caray, si uno ve un parque que está abandonado, que llegan ahí los muchachos a drogarse, a vender drogas, que ahí está lleno de delincuentes, tenemos que rescatar ese parque. Y lo hacemos nosotros, ponemos parte del dinero, hasta la mitad, incluso, a veces más, para que ese parque se rescate.
Y el convenio es que la Policía Municipal o Estatal vaya y cuide ese parque y, sobre todo, que las vecinas y los vecinos se organicen para hacer torneos de fútbol, para hacer torneos de fútbol rápido, para hacer torneos de carreras, ahí en el parque, para hacer clases de jazz o de tai chi, o lo que sea. Que se organicen los vecinos.
Y así llevamos, amigas y amigos, ahí pian pianito, como se dice, tres mil 400 espacios públicos rescatados en el país. Desde una esquina donde apenas hay unos juegos infantiles, hasta, por ejemplo, el Parque Bicentenario, aquí en la Refinería 18 de Marzo, que, por cierto, invito a todos ustedes a visitarlo. Ya lo han visitado como 150 mil familias en unas cuantas semanas.
Otro es Escuela Segura. La verdad, el problema de la violencia de unos niños contra otros, que forma parte de esta gran problemática social y cultural que tenemos, la violencia está penetrando los valores y las ideas, pero la violencia en las escuelas de unos contra otros, la presencia de drogas en las escuelas, la formación de bandas, la presencia de armas, no lo podemos tolerar.
Y por esa razón, arrancamos Escuela Segura, que forma una organización entre padres de familia y maestros que por primera vez echaron a andar muchos Comités de Participación Ciudadana, así se llaman, y vigilan eso: Cómo está la escuela en drogas, cómo está la escuela en adicciones, cómo está la escuela en violencia. Y ya llevamos 30 mil Escuelas Seguras siguiendo este mecanismo.
O los Centros Nueva Vida. Del Sector Público, por ejemplo, no había prácticamente, bueno, había diversas modalidades, era básicamente un esfuerzo de la sociedad civil, los Centros de Prevención y Tratamiento de Adicciones.
Nosotros a partir de que le decomisamos, ya no me acuerdo, como 200 y pico de millones de dólares a aquel personaje de nacionalidad china, aquí en la Ciudad de México, ese dinero, una gran parte la empleamos para empezar a construir Centros Nueva Vida, que son centros de prevención y tratamiento de adicciones. Y creamos 300 centros de un solo golpe, y siguen creciendo estos Centros Nueva Vida, por primera vez, digamos, en el país. Y tenemos que ir, todavía, por más. Por cierto, hemos casi quintuplicado el presupuesto para prevención y tratamiento de adicciones.
Otra es la cooperación internacional. La extradición que se ha realizado de delincuentes a los Estados Unidos, que es, muchas veces, la sanción que más temen, porque pierden, muchas veces, el dominio que en las propias cárceles llegan a tener aquí, y también, es básico el rompimiento de la red del criminal de su propio hábitat.
Ustedes pueden ver que el Gobierno ha entregado, por México, 380 criminales buscados por la justicia de otros países; entre otros, fundamentalmente, Estados Unidos, nos han entregado 88 criminales buscados por la justicia de México.
Termino esta parte diciendo que el primer deber del Estado, señoras y señores, es proteger a los ciudadanos. Y sí, efectivamente, este Gobierno pudo haber evadido la responsabilidad, pudimos habernos hecho a un lado, pudimos haber dicho: eso de los delitos le toca a cada estado, que vea cómo le hacen. Pudimos haber simulado la realidad. Pudimos haber, también, caído o avanzado en la tentación de arreglarnos con los criminales, y que no nos molestaran a nosotros, y dejando a la gente inerme y a su suerte, como se ha hecho en México muchas veces.
Pero no, señores. Nosotros optamos por cumplir nuestro deber; optamos por cumplir en nuestro deber de proteger al ciudadano. Porque yo no puedo estar oyendo, o viendo, como alguien tiene, por ejemplo, una amenaza de extorsión, un comerciante, cómo alguien tiene secuestrada a su familia; cómo nos relatan cómo llegan en camionetas, de 20 camionetas, gente armada hasta los dientes, a aterrorizar a un pueblo, y no hacer nada.
No se puede, simple y sencillamente, en conciencia, quedarse esperando cruzado de brazos a que esa delincuencia se apodere de ese pueblo, y no meterse, como sugieren muchos.
La violencia es de los violentos, y para enfrentar a la criminalidad, válgame la redundancia, hay que enfrentar a la criminalidad y hay que enfrentarla con fuerza, con una fuerza superior a los propios criminales, con determinación y con perseverancia, porque tiene que ser, precisamente, la perseverancia lo que haga que ganemos este gran esfuerzo.
Miren. Decía mi padre que los grandes árboles no caen de un hachazo y éste es un árbol grande, éste es un árbol viejo, añoso, de raíces metidas hasta adentro y tenemos que darle uno y otro, y otro y otro hachazo.
Este año, por ejemplo, ha sido, precisamente, volviendo al tema de la frontera Norte, un año muy duro para todos. Pero la perseverancia y la presencia de las Fuerzas Armadas ahí, ha ido doblegando y doblegando a los criminales y sí, por desgracia, con tristeza, con honda tristeza hemos tenido bajas de soldados y marinos, que han caído en acción ahí. Pero también es cierto que por cada uno de ellos han caído más de 10 de los criminales que los han enfrentado y que se han tenido que replegar ellos, y que los delitos vienen reduciéndose en esa zona y que el Estado, el Gobierno Federal tiene pleno control de cada uno de esos puntos.
Hoy, amigas y amigos, la perseverancia va a empezar a rendir los frutos en este gran esfuerzo y tenemos que seguir hacia adelante. Tenemos que seguir, porque nuestro objetivo es, por una parte, el dar tiempo para que se puedan reconstruir las instituciones encargadas directamente de la seguridad pública en cada una de esas comunidades y estados.
Pero el objetivo de largo plazo y que todos compartimos, es, precisamente, el darnos un México seguro y en paz, un México donde prevalezca la ley y donde mande el Gobierno y la sociedad, y no los delincuentes, un México donde se imponga la autoridad del ciudadano y del ama de casa.
No será fácil, no es fácil, no es rápido, no es sin costos, pero nosotros preferimos asumir los costos de actuar ahora, en lugar de asumir los otros, los costos de mañana, de tener al país hundido y en manos de los criminales, que no lo vamos a permitir y, por supuesto, que vamos a ganar en este gran esfuerzo de derrotar a la criminalidad.
Y paso rápidamente al otro tema, que es Economía Competitiva y Generadora de Empleos. Aquí hay buenas cosas que comentar. Yo sé que el tema de seguridad, hasta a mí también me centra mucho las preocupaciones y las expresiones y las emociones; pero, la verdad, amigas y amigos, hay muy buenas noticias en México en muy diversas áreas.
Vamos a entrar, por ejemplo, al tema de economía. Primero empecemos por ubicarnos quién es México, cómo somos. Primero, somos la economía, una de las economías más grandes del mundo, la economía 14 para ser exactos, muy pegaditos ahí a Australia, a Corea del Sur.
El PIB per cápita, que es el indicador, yo creo, más elemental, más sólido, diría yo, para medir cómo avanza o no económicamente un país, no sólo si produce, es decir, si produce más o no, si crece económicamente, el PIB per cápita se ha venido incrementando sistemáticamente en el país.
Ustedes pueden ver, de un 6.4 mil millones de dólares en el año 2000, a más de nueve mil millones de dólares en el año 2000, esto de acuerdo con la paridad de poder de compra, que es un indicador muy complejo, pero esto lo hacemos porque si ustedes comparan con otros países, con India, con China, por ejemplo, México tiene un PIB per cápita más alto. Tenemos un PIB per cápita, incluso, más alto que Brasil, y sigue creciendo este indicador. Este año, por ejemplo, esperamos un crecimiento del cinco por ciento de nuestra economía.
Otras son las cosas que han pasado, precisamente, en materia de estabilidad macroeconómica. Yo comentaba hace unos días que en México, es que es una población muy joven y ya muchos de los muchachos, que son la gran mayoría, ni se acuerdan porque no lo vivieron. Pero en México subía, por ejemplo, llegó una época en que subía el aceite o el pan de caja 70 por ciento cada mes, subía el pan de caja 70 por ciento cada mes. Se generaban, precisamente, condiciones opresivas para la gente. Como subían tanto los precios, el salario mínimo, por ejemplo, se venía abajo; aunque se ganara lo mismo, ya no se compraba ni la mitad.
El salario mínimo cayó en México en los 80, 50 por ciento. El salario mínimo en los 90 cayó 35 por ciento. Esta es la primera década, en casi 40 años, en que el salario mínimo se recupera.
Por qué.
Porque hay condiciones estables de inflación y eso le ha dado una gran solidez económica a México. Ustedes pueden ver aquí, por ejemplo, cómo todavía en la década pasada, sobre todo de la crisis, pero había unos picos de inflación muy grandes, y a partir ciertamente del 2000 se ha mantenido una tendencia realmente estable en materia de inflación.
En los 4 por ciento más o menos estamos ahora, que ha permitido, verdaderamente una gran tranquilidad y una gran certeza de la economía. Lo mismo la deuda, la deuda del Gobierno. Si vemos las tasas de interés. También hay que recordar, esto de tener créditos hipotecarios es relativamente nuevo, es decir, relativamente nuevo, porque durante mucho tiempo, en México no había crédito hipotecario, no se podían pagar tasas de interés a más del 100 por ciento o el 50 por ciento.
Hoy hay tasas de interés hipotecario, no sé, al 10, al 12, al 13 por ciento, al 14. Y eso ha permitido que más gente pueda, por ejemplo, comprar casa, comprar coche o financiar su empresa.
Las tasas de interés en el país, por ejemplo, en la deuda del Gobierno también han bajado significativamente, y se mantienen en su etapa de más bajo nivel, prácticamente en la historia contemporánea, por lo menos desde los años 60 hacia la fecha.
El riesgo-país de México, es decir, qué tanto se le tiene, qué tanto dinero más se le tiene que dar de intereses, dicho muy vagamente, a un inversionista para que invierta en un país. El riesgo-país de México es más bajo que muchos de sus competidores. Es más bajo que Brasil, por ejemplo; es más bajo que Rusia, es más bajo que Colombia, es más bajo que Sudáfrica, que Turquía.
El riesgo-país en México en el propio 2000 era de casi 400 puntos; el riesgo-país en México es de 157 puntos. Es decir, somos un país confiable, medido, precisamente, no por lo que digan analistas, que también tenemos muy buenos analistas que así lo dicen, sino por lo que pagan o por lo que piden que se le pague a un inversionista para invertir en títulos de México.
El riesgo-país de Argentina, por ejemplo, es de 702 por ciento, el de México es de 157. También nos hemos fortalecido para aguantar los choques externos, las crisis éstas. Ustedes pueden ver el desorden o el problema que hay ahorita en Europa.
Vean, la raya anaranjada que está la pantalla, son las reservas internacionales del Banco de México.
Qué pasaba antes.
La verdad, las reservas eran muy chiquitas. Debíamos muchísimo por deuda externa. Venía una crisis, una devaluación, estallaba eso y se acababan las reservas o al revés. Venía una crisis y todo mundo empezaba a sacar dólares y tronaban las reservas y adiós casa, adiós coche, adiós empleo, adiós todo. Venían las crisis.
Hoy las reservas han llegado a su punto más alto en la historia de México: 110 mil millones de dólares en el Banco de México.
Qué tanto es eso.
Suena una cantidad importante. Pero les doy otro referente. Las reservas del Banco de México alcanzan, antes eran una partecita que nos ayudaba a pagar algunos meses de la deuda. Hoy, las reservas del Banco de México son más del doble de toda la deuda externa de México, con lo cual habla de una enorme fortaleza del país.
Qué tanto se ha depreciado el peso.
También aquí, por ejemplo, en la depreciación, se devaluó, se depreció tres mil 178 por ciento, en el 83-88; casi 50 por ciento en el 89-94; 173 por ciento en el 95-2000, y esta Administración es la que tiene la tasa de depreciación del peso o de devaluación más baja de los últimos 30 años en la economía nacional.
Otros datos.
Los niveles de deuda pública, que ya comentaba, aquí los tienen. Cuánto es la deuda del Gobierno, con respecto a su Producto Interno Bruto. Pueden ver los casos.
El promedio de los países de la OCDE, los llamados países de economías más fuertes, anda por el 100 por ciento, más o menos. Grecia, que anda muy revuelta, ahorita, con todo el problema que tiene de economía en desorden, 133 por ciento del PIB; y por ahí están varios.
Por ejemplo, no sé si alcancen a ver ustedes, pero por ahí está Alemania, 75; Europa, 78 por ciento del PIB; Irlanda, que también está teniendo un problema enorme, económico, en este momento, 80 por ciento del PIB; México, la deuda contra el PIB es 34 por ciento. Casi la tercera parte del valor de nuestra producción, es el tamaño de nuestra deuda pública.
El déficit público, es decir, la diferencia de entre lo que hasta el Gobierno, y lo que ingresa al Gobierno. El déficit público de México es de 2.5 por ciento del PIB. Compárenlo con otros; con Rusia, por ejemplo, es casi el cinco por ciento, con Grecia, otra vez, el ocho por ciento; Irlanda, con los problemas que tiene, 12 por ciento.
Y por qué menciono Grecia e Irlanda, amigos. Son grandes países, excelentes economías. Nunca he estado ahí, pero sé que son países desarrollados. Estos países tuvieron problemas parecidos a los nuestros con la crisis que acaba de pasar, sólo que para neutralizarle le siguieron gastando mucho más de lo que tenían.
Nosotros hicimos algo así para reducir el impacto en la gente más pobre de la crisis del año pasado, pero cuando vimos que iba pasando la crisis, retomamos la disciplina y empezamos a cerrar el déficit.
Tuvimos que tomar algunas medidas de aumento de ingresos públicos, que costaron políticamente. Por supuesto que costaron. Pero había que hacerlo. Por qué. Para evitar que el país entrara en una espiral incontrolable de desorden económico. Nosotros asumimos ese costo y lo evitamos.
Pero estos países se siguieron de largo con el gasto y llega un momento en que la economía cobra cuentas a las finanzas públicas. Y, entonces, Grecia, Irlanda, incluso España, que no está en la misma situación, qué han tenido que hacer. Han tenido que reducir las pensiones de sus jubilados, han tenido que reducir los salarios de su gente, han tenido que despedir a decenas de miles de personas de sus trabajos, y aún así no pueden ajustar sus finanzas.
Por esa razón, amigas y amigos, yo digo que vale la pena la disciplina fiscal con la que hemos actuado.
Hay otros porcentajes. Ya hablé de la deuda externa. La cobertura. Es lo que yo decía hace rato. Por ejemplo, en el 2000, todas las reservas del Banco de México alcanzaban, apenas, para pagar la mitad de la deuda externa. Ahora las reservas del Banco de México alcanzan para pagar dos veces y más toda la deuda externa del país.
Los empleos. Que esto es algo que a mí me interesa mucho, porque sé que es la prioridad de los mexicanos y la mía. Porque sé que ser Presidente del Empleo, como me propuse, implica generar y generar trabajos para los mexicanos.
Aquí tuvimos, efectivamente, un elemento que quiero describir. No sé si puedo explicarme con estas gráficas, la roja y la azul. Ésta es la caída de la economía en 1995, cuando fue la crisis, aquella del Tequila, que se llamó. En fin. Le dieron muchos nombres, con muchas connotaciones políticas, pero en fin.
Cayó la economía 6.2 por ciento. Ahora el INEGI acaba de revisar las cifras para este año. En fin. Dice que la economía cayó más o menos igual, 6.5 el año pasado. Sí, estuvo dura, muy bien.
Aquella, hay que aclarar, fue generada por errores en política pública, relacionados, precisamente, con el gasto y el con tipo de cambio, errores internos. La del año pasado fue causada por el colapso del sistema financiero en Estados Unidos, que lo tenemos, además, aquí cerquita. Evidentemente, nos arrastró el epicentro.
Sin embargo, en aquél 1995, por desgracia, el empleo en México se contrajo ocho por ciento; es decir, casi 10 trabajadores de cada 100, o si quieren de otra manera, uno de cada 10, casi uno de cada 10 perdió su trabajo en México.
En esta crisis, sin embargo, aunque estuvo igual de dura, se perdieron 1.2 nada más; es decir, casi uno de cada 100 empleos en México nada más. Por qué. Porque las medidas que tomamos para compensar los efectos de esa crisis funcionaron y nos evitaron un golpe mayor.
Evidentemente, ésta es la curva de crecimiento del empleo en México. Ustedes pueden ver que arrancamos la Administración bastante bien, siguiendo de otra buena Administración de empleo. Viene aquí la crisis terrible del año pasado y cae, pero hoy ya estamos, incluso, muy por encima de lo que había antes de la crisis, en empleos.
Cuántos empleos se han creado en México, por ejemplo, este año. Yo le he pedido a los Secretarios de los ramos que vayan haciendo la cuenta y los vayan siguiendo semana, o mes a mes. El último dato público que dimos fueron 880 mil nuevos empleos, entre enero y 15 de noviembre.
Ahora voy a rectificar, amigas y amigos, porque me acaban de pasar esta mañana, el empleo, el cierre del empleo, no ayer; que es 30 de noviembre, yo creo que van a caer otros más por ahí, pero el empleo al lunes pasado.
Cómo lo calculamos. Primero. De todas las contrataciones que se hacen en el Seguro Social, es decir, un empresario contrata un empleado, va y lo registra en el Seguro Social, y obviamente paga su cuota obrero-patronal.
De todos los empleos que se registran nuevos, le restamos qué, también todas las bajas, todas las renuncias, las liquidaciones, las defunciones. Y eso nos da el empleo neto nuevo creado.
Cuántos empleos se han creado hasta el lunes pasado, de enero al lunes pasado. 962 mil nuevos empleos, que es la cifra más alta en la historia de México en el Seguro Social.
Y aunque viene en diciembre, generalmente el cierre de año marca una baja estacional, porque muchos contratos se vencen, y renuevan, otra vez, en enero, ojalá podamos irle pegando, por lo menos cerca del millón en estos días que faltan del año.
La tasa de desempleo es alta, pero comparémoslo con tasas de desempleo de otros países; lo tienen ahí, a la derecha. México es 5.7, Brasil 6.2, Inglaterra 7.7; el promedio de la OCDE 8.3; Estados Unidos es casi 10 por ciento la tasa de desempleo. En fin.
Avances en desregulación.
Aquí, por ejemplo, lo dije el 2 de septiembre del año pasado: queremos una reforma regulatoria, una reforma donde las normas que no sirven se vayan y, más o menos, lo que les dije a mis Secretarios fue: miren, hagan de cuenta que se tienen que ir de viaje, y llévense nada más las reglas que les sirven para el viaje, el paquete de mano, y todas las demás, que no saben a quién se le ocurrió esta circular, y por qué razones metieron este reglamento, y quién sabe qué intereses habría del aquel otro oficio, todas esas, por favor, que no sepan ni para qué estamos, ni para qué están las reglas, para afuera.
Y entonces, en este año 2010, hemos eliminado, hemos borrado, literalmente, de la Administración Pública, entre circulares, oficios, reglamentos, casi 15 mil reglas, que es casi la mitad, 42 por ciento de toda la reglamentación Federal. Y vamos por más.
También, otra cosa que hemos hecho para facilitar las empresas, es simplificar su trámite. Si alguno de ustedes, muchos de ustedes, hicieron, han hecho el trámite de alguna empresa, antes tenían que ir, hasta por normas constitucionales, a Relaciones Exteriores para pedir permiso, a Economía para abrir el registro, al Registro de Comercio; tenían que ir, también, al Seguro Social, a Hacienda, esa no se puede pasar. Y total, que de Herodes a Pilatos, y pasaban varios meses, incluso, hasta que abrían la empresa.
Hoy logramos, a través de un portal electrónico, www.tuempresa.gob.mx, que todo eso, lo de Relaciones; y luego hay que ir a Relaciones a que le den a uno el nombre. No sé por qué, como que Relaciones Exteriores ha sido como el padrino de todas las empresas de México, autoriza cómo se llaman, el que hace el bautizo.
Hoy, todo se puede hacer en la oficina del Notario, del Corredor Público, allí, en una computadora, calculamos que en dos horas, todos los trámites del Gobierno Federal. Ahora, faltan los locales, pero con esa sola medida, según, por ejemplo, el Banco Mundial, que nos anda midiendo a todos los países a cada rato, el tiempo para hacer una empresa ha bajado de 58 días, todavía en 2006, a nueve días en México. Es decir, estamos avanzando fuertemente, también, en desregulación.
Cómo hemos avanzado. Decía yo hace rato que hay consultores que, también, nos avalan lo que decimos. A ver si se entiende esta gráfica, que es un poquito complicada. La siguiente.
Miren, el color tenue, el suave, es el lugar que ocupábamos antes en materia de países más atractivos para la inversión extranjera directa, según las Naciones Unidas, la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio.
México ocupaba, en el año 2009, todavía el año pasado, el lugar número 12. Y este año, 2010, con todas las reformas que estamos haciendo, ya avanzamos al lugar número seis en todo el mundo, por delante, incluso, de Inglaterra, de Indonesia y de Alemania; es decir, la facilidad para hacer negocios, de acuerdo con las Naciones Unidas.
Otro índice de confianza, perdón, es países más atractivos para inversión extranjera directa. Otro índice de confianza, éste es de A.T. Kearney, una consultora, México ocupaba en el 2007 el lugar número 19 entre los países del mundo. Hoy ya pasamos, de acuerdo a esta consultora, al número ocho.
Hay otras más. Por ejemplo, el Índice del Banco Mundial, el Doing Business, el Banco Mundial revisa a todos los países y dice: A ver, dónde es más fácil y dónde es más difícil hacer negocios. Se miden, más o menos, 150 países.
México, cuando entramos al Gobierno, ocupaba el lugar número 73 en el año 2006, ahora en el Doing Business ocupamos el lugar 35; es decir, bajamos a la mitad en el rango de Doing Business, con lo cual está siendo México el país, en esta lista que tengo aquí, entre Singapur, Hong Kong, Nueva Zelanda, de varios países es el país que más lugares ha mejorado en hacer negocio en este indicador del Banco Mundial entre 2006 y 2010.
Es también, hay que decirlo, el país mejor posicionado en América Latina, el mejor. En otras palabras, de acuerdo al Banco Mundial, México es ya el mejor país para hacer negocio en América Latina.
Y también con otros países que son admirables por su crecimiento, los llamados BRICs: Brasil, Rusia, China e India, ustedes pueden ver que están varios lugares atrás de nosotros. México tiene el 35, China el 79, Rusia el 123, Brasil el 127. En fin.
Otra cosa que ha pasado. Esto lo que indica es que México hoy es más competitivo. Eso lo puedo afirmar categóricamente. México es más competitivo. Pero uno dirá:
Y cómo se refleja esto en los productos mexicanos.
Vamos a medir qué tanto han bajado o qué tanto han subido las ventas de productos mexicanos en un mercado, por ejemplo en Estados Unidos, y nos vamos a Estados Unidos. Cuando México firmó el Tratado de Libre Comercio, que fue muy bueno.
Cuando México pasó, firmó el Tratado de Libre Comercio empezó a crecer fuertemente su comercio hacia Estados Unidos, pero qué paso por ahí del 2000, entre que nos empezamos a atorar por falta de reformas y también que entró China de gran jugador en el comercio mundial, nos venimos abajo como exportador a Estados Unidos.
Qué es lo que tenemos ahora.
Hoy, México ya tiene, empezamos por ejemplo en el 2008, teníamos como el 9.5 por ciento de todo el pastel, lo que se llama el market share. De todo el pastel de los productos que compra Estados Unidos, México tenía como el 9.5.
En estos dos años, México ha venido creciendo sistemáticamente y hoy ocupamos el 12.2 por ciento. Hemos comido casi 3 puntos de pastel en Estados Unidos, frente a Japón, frente a Canadá, frente a Brasil, frente a grandes exportadores. Les hemos comido parte del terreno y hoy estamos en el punto más alto de exportaciones mexicanas a Estados Unidos, en términos absolutos y en términos relativos.
Y no sólo eso. No sólo han crecido a Estados Unidos, sino también a otras partes del mundo, como pueden ver en la gráfica.
Se dice que no apoyamos el campo. Lo digo con toda honestidad y sin ofender a nadie, pero nunca, nunca se había apoyado al campo como lo hemos apoyado nosotros, incluso en los últimos 10 años, pero especialmente este Gobierno. Es decir, en el 2006, se le daban al campo en México 153 mil millones de pesos; en el 2011 se le dan casi 300 mil millones de pesos, el doble.
Por qué.
Porque queremos combatir la pobreza en el campo, porque queremos que crezcan los productos del campo. Y están creciendo.
No me trajeron la gráfica, pero el Producto Interno Bruto del campo en México se ha duplicado, más o menos en los últimos cinco años; es decir, produce más o menos el doble. Y no sólo eso, sino que las exportaciones mexicanas a todo el mundo, de agro. Había la idea de que, por ejemplo, el Tratado de Libre Comercio iba a acabar con el campo, que no podíamos competir con otros.
La verdad, es que no es cierto, tampoco. Los mexicanos somos buenos para eso y para muchas cosas, la verdad. A veces no creemos en lo que podemos hacer, pero somos muy buenos competidores, y eso se refleja en cómo han crecido las exportaciones del campo al mundo; pasaron de ocho mil millones de dólares en el 2000, a 17 mil millones de dólares en este año, 2010.
En fin. Otras cosas. Qué hemos hecho para cambiar, para cambiar a México en lo económico. Se dice qué le faltan reformas a México, y es cierto, pero también hay que contar que ya hemos hecho varias.
Si ustedes hacen el recuento, hicimos la de pensiones del sector público. Y con esta reforma, por ejemplo, nos ahorramos 30 por ciento del Producto Interno Bruto a valor presente neto.
Para darles una idea. Esa reforma, por ejemplo, una que se habla mucho, de IVA completo, etcétera, le daría a México más o menos, como poco menos del uno por ciento al año del Producto Interno Bruto en ingresos para el Gobierno. Con la reforma que se hizo estamos ganando 30 por ciento, 30 puntos del Producto Interno Bruto. Son como 30 años de reforma de IVA.
Hicimos una reforma también fiscal y tributaria, complicada, lo admito, pero eso nos está haciendo depender menos del petróleo. Una reforma importante al sector energético, que nos ha permitido frenar la caída en la producción de petróleo.
Una importante reforma en telecomunicaciones. Por ejemplo, dimos certidumbre a los radiodifusores. Licitamos, por primera vez, en muchos, muchos años frecuencias radioeléctricas. Para qué. Para que haya más competencia en México.
Antes había, ustedes lo saben, por ejemplo, un gran jugador, un buen jugador, como era, por ejemplo, TELMEX era, TELCEL era el único que había en telefonía celular, y IUSACELL, por ejemplo. Hoy tenemos TELMEX, IUSACELL, Telefónica, Nextel, que son jugadores en serio a nivel mundial.
Y díganme ustedes, y revisen qué ha pasado con las facturas del costo por llamada de teléfono celular. Se ha venido abajo el costo por llamada, el costo de Internet. Por qué. Porque hay más competencia en México.
Y estas reformas también cuentan. Y ahora vamos por televisión digital. Y ahora vamos a seguir, además, ampliando la Banda Ancha en el país por todas partes.
La desregulación, que ya mencioné, y otras que están en el Congreso. Una Ley de Competencia, una Reforma en Materia Laboral y una que está pendiente de Asociaciones Público-Privadas, que ojalá las puedan aprobar pronto.
Yo dije que éste iba a ser el sexenio de la infraestructura y, también, ha sido. Fíjense, el promedio que se invertía en la década pasada era, más o menos, el tres por ciento del Producto Interno Bruto en infraestructura. En la Administración pasada se subió a tres y medio.
Nosotros ya estamos invirtiendo este año, 2010, casi cinco por ciento de inversión en infraestructura. Y no sólo crece el porcentaje, sino, obviamente, como, también, crece el PIB, es muchísimo más, yo diría, más del doble de lo que invertía en el año 2000 en infraestructura en el país. Perdón, aquí está la gráfica en pesos, digamos.
Cuánto se invirtió en los cuatro primeros años de los tres últimos sexenios. Casi 400 mil en el de 95-98, en los cuatro primeros años; casi mil millones de pesos en infraestructura del 2001 a 2004. Nosotros llevamos dos mil 154 millones de pesos invertidos en infraestructura, más del doble que los cuatro años en la Administración anterior y casi más de cinco veces de los cuatro años de la anterior, todavía.
Carreteras, por ejemplo. Se han construido o modernizado, para decirlo rápido, más kilómetros de carretera que nunca en el país. Y aquí están las cifras. Cuántos kilómetros se han construido o modernizado de carreteras los cuatro primeros años de las Administraciones anteriores. Seis mil 200 en los primeros cuatro años, 2001-2004; nosotros llevamos 15 mil 400 kilómetros de carretera construida o modernizada en esta Administración.
También, se dice que no nos interesa PEMEX y que no le invertimos a PEMEX. La verdad es que tampoco eso es cierto. Hemos invertido más que nunca en Petróleos Mexicanos, y aquí están las cifras.
Ya, para no irme tan atrás, en 95-98 se invirtieron 132 mil millones de pesos. Ahora en PEMEX, en estos tres años, hemos invertido 921 mil millones de pesos en este Gobierno, en lo que va de la Administración.
Y algo muy importante, que está a la derecha. Es la llamada tasa de restitución de reservas. Qué es esto.
Qué podemos hacer para que la industria petrolera permanezca, y nos dure, no sé, 50, 60, 100 años. La clave es que las reservas siempre sean suficientes para cubrir la producción.
Yo digo que es la regla del abarrotero: por cada lata de sardinas que vende del mostrador, ya debe de tener otra en la bodega, para poner, ahí, la lata de sardinas que se vendió. Es una tasa de reposición del 100 por ciento: una lata vendida, una lata repuesta.
No es por nada y, también, sin agraviar a nadie, pero hace 10 años, la tasa de reposición era del 20 por ciento. Qué significa. Que por cada barril que descubríamos en reservas, ese mismo día ya se habían vendido cinco. Y qué es lo que estaba pasando. Se nos estaban yendo hacia abajo las reservas petroleras de México; y bajaron de, más o menos, de un tiempo esperado de 22 años, a nueve años.
Qué estamos haciendo nosotros. Elevando la Tasa de Reposición de Reservas. Y por ejemplo, en las reservas 3P. Reservas probadas, las que ya estamos explotando, prácticamente, y que sabemos que están ahí, y de qué dimensión son, estamos subiendo del 20 por ciento, del 23 más o menos, hasta el 77 por ciento, y no pararemos hasta llegar al 100 por ciento.
Pero si a las reservas probadas, le agregamos las probables y las posibles, las llamadas 3P, ya México, después de una caída brutal, por falta de inversión, tiene una tasa de restitución de reservas de 129 por ciento. Es decir, estamos descubriendo más reservas, más barriles que los que estamos vendiendo diariamente.
SESIÓN DE PREGUNTAS Y RESPUESTAS EN LOS DIÁLOGOS CON MOTIVO DEL CUARTO AÑO DE GOBIERNO
MODERADOR: Con su venia, señor Presidente. Voy a explicar la mecánica de la Sesión de Preguntas y Respuestas.
Al llegar ustedes han llenado en la ficha de registro una pregunta para el señor Presidente. De manera es que aquí en esta tómbola haremos el sorteo. Sacaremos la pregunta, leeré el nombre de la persona que quiere hacer la pregunta, no la pregunta.
La persona de quien lea el nombre, le pedimos se ponga de pie para que le acerquen el micrófono y directamente le haga la pregunta al señor Presidente, que escribió en la ficha del registro.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Me parecen muy poquitas.
MODERADOR: Son las que han llegado, señor Presidente.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Bueno. Sale pues.
MODERADOR: Entonces, sacaremos la primera.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Pero una mano inocente.
MODERADOR: El ingeniero Alejandro Hulz Piccone. Si se pone de pie, por favor.
ING. ALEJANDRO HULZ PICCONE: Buenos días. Señor Presidente. Yo quisiera preguntarle si considera usted que el medio ambiente y los recursos naturales deben de recibir un mayor apoyo en los próximos años. Si sí o no, por qué.
Gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Ahí sí me pega en mi mero mole, ingeniero. Me imagino que usted se dedica a los temas ambientales, pero es así o no.
La verdad es que. Yo la verdad he dicho y no es porque esté aquí, Juan Elvira, espero que no se me ofenda, está por acá Juan, pero he dicho que a mí me encantaría ser Secretario de Medio Ambiente, pero por supuesto que tienen que recibir más recursos.
Mire. Yo recuerdo que yo era diputado Federal, Coordinador del PAN en 2000-2003, y hubo una reforma muy, muy tortuosa que finalmente, uno de los intentos fuertes de reforma fiscal que se han hecho, pero finalmente se generaron recursos de otras partes.
Yo me acuerdo que me puse de acuerdo con el entonces Alberto Cárdenas, Secretario del Medio Ambiente. No. Era Director la Comisión Nacional Forestal y después fue Secretario de Agricultura conmigo y le estoy muy agradecido por el excelente papel que tuvo, por cierto.
Y le dije: Mira, Beto, aquí todo mundo jalonea y hace, y empuja, y presiona, y grita, pero aquí entre tú y yo, nos vamos a quedar con una parte para poderle darle a los bosques, porque a nadie le interesa.
Entonces, había 280 millones de pesos en el Presupuesto anterior para bosques, que era más o menos lo mismo que venía en ese Presupuesto. Dije: Mira, a ver cómo le hacemos, Beto, pero lo vamos a subir entre tú y yo a mil millones, y yo aquí me voy a quedar encima de este Presupuesto, como si fuera balón de fútbol americano. Entonces, y lo subimos, y se triplicó de un jalón los recursos para los bosques.
Y ahorita ya el Presupuesto de ProÁrbol anda rondando. Qué serán. Como los seis mil. Seis mil millones. Seis mil 500 millones, más o menos. Y tiene que ir por más. Tenemos que pagarle a la gente porque cuide bosques y selvas.
No lo mencioné, pero en plantas de tratamiento. En el 2000 sólo se trataba el 20 por ciento del agua residual que se usa en México. Ahorita ya estamos tratando el 45 por ciento del agua residual y vamos a llegar al 60 por ciento del agua residual. En cuatro años hemos hecho 400 plantas de tratamiento, 100 por año.
Y, por ejemplo, el Distrito Federal, la Ciudad de México, ahorita está tratando menos del 10 por ciento del agua residual. Una obra que se ha pospuesto mucho tiempo, décadas, la estamos haciendo. Ya empezó a construirse la planta de tratamiento en Atotonilco, en Hidalgo, que va a ser la planta de tratamiento más grande de América Latina para tratar el agua residual de la Ciudad de México.
Y lo mismo digo de Guadalajara. Estamos haciendo la Planta El Ahogado; estamos haciendo la Planta, se llama Agua Prieta, precisamente, en el Norte de Guadalajara, para tratar toda el agua residual de la Zona Metropolitana de la Ciudad de Guadalajara.
Entonces, sí se tiene que dársele más recursos al medio ambiente y tiene que actuarse mucho más. Desafortunadamente, a la hora de los Presupuestos pesan mucho, pesa mucho la política.
Entonces, yo me imagino, la dinámica de las bancadas la conozco. Si hay muchos diputados, por ejemplo, de un sector o de otro, del campo, por ejemplo, jalan, naturalmente, para el campo; si hay maestros, jalan para los maestros; si hay obreros, jalan para otras cosas.
Y creo que eso es lo legítimo en el Congreso, pero tenemos que hacer mucho más grande y más fuerte la fuerza de los ambientalistas. Y yo ahí me incluyo, me apunto y para lo que se ofrezca, ahí vamos a estar.
MODERADOR: Pregunta del licenciado Eduardo Cota Corona.
LIC. EDUARDO COTA CORONA: Buenos días, señor Presidente.
Yo quisiera preguntarle cuáles serían las acciones para el desarrollo social que enfrentará su Gobierno en los siguientes años.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: La más importante. La meta que tenemos, más importante, es la reducción de la pobreza, para empezar. Y la verdad, es que el Programa Oportunidades ha demostrado su eficacia como Programa.
Fíjense ustedes que en los indicadores de pobreza, de 39 millones de mexicanos viviendo en pobreza extrema, ya incluyendo el crecimiento de población, se bajó entre 1997 y el año pasado, el año antepasado, que es el último dato que hay, de 39 millones a 18 millones viviendo en pobreza extrema; y eso que se rebotó, porque ya se había bajado mucho más, como a 14 millones.
Y obviamente rebotó por la crisis económica que se vivió, tan severa. El dato, incluso, lo refrenda la CEPAL, un dato que publica el día de hoy, pero obedece a ese fenómeno, de la manera tan inclemente que pegó la crisis económica.
Este año, en los indicadores que nosotros tenemos, por ejemplo, sacamos lo que llaman los estadísticos, un proxy, con las encuestas más bien referidas al desempleo. Ahí sacamos un proxy del ingreso de las personas, y con ello estamos viendo que, nuevamente, con el crecimiento que estamos teniendo, y con el aumento que le dimos, tanto en la cantidad que se paga a cada persona, como en el número de beneficiarios, al aumentar de cinco millones de familias, a seis y medio millones de familias el número de beneficiarios de Oportunidades, y al aumentar la cuota a cada uno, hemos nuevamente retomado la senda de reducción de la pobreza, y ese es el principal reto.
De todos modos, con todo y crisis, la pobreza se redujo, entre el 2000, y el 2010, el 2008, que es el dato disponible, se redujo en una cuarta parte; el 25 por ciento de pobres, en extrema pobreza, menos. Eso tiene que ser.
El otro reto social tiene que ser, obviamente, asociado con los elementos igualadores en la sociedad, que son educación y salud.
Aquí, el reto para mí, es que avancemos, probablemente no alcance la meta, pero ojalá le podamos tirar a la cobertura total para estudiantes de educación media, sobre todo en áreas técnicas. Que podamos empujar para allá, y seguir abriendo la cobertura en educación universitaria. Porque la educación es lo único que iguala de verdad.
Es decir, si podemos darle igual al hijo del pobre, que al hijo del rico, una educación, verdaderamente, buena y de calidad, eso iguala a esas dos personas. Eso va a permitir que la diferencia en el futuro sea su propio trabajo y su propia capacidad.
El otro elemento igualador que tenemos, y que lo estamos, afortunadamente, llegando a la meta, no hay que aflojar, es en materia de salud. Insisto, miren, ustedes recuerdan toda la discusión que hubo en Estados Unidos el año pasado, por pasar la reforma de salud del Presidente Obama. Y eso era para aumentar una parte de la gente que no tiene cobertura de salud en Estados Unidos. Pero con todo y reforma, que fue un lío político tremendo, Estados Unidos no llega todavía, y todavía está lejos de la cobertura universal de salud.
Nosotros, al paso que vamos, vamos a llegar, con problemas y con insuficiencias, pero vamos a llegar a cobertura universal de salud, que es una meta que muy pocos países en el mundo han logrado.
Entonces, igualar oportunidades, seguir venciendo la pobreza extrema, meterle a educación, meterle a salud. Y otra cosa que me está preocupando, que es un deterioro muy acelerado en la integración de las comunidades, de las familias y, sobre todo, en los valores de los jóvenes.
Eso, en sí mismo, es un elemento cualitativo, difícil de medir cuantitativamente, pero es un elemento crucial que, incluso, está atrás de factores de violencia, como los que vive México.
Este salto que da el niño adolescente, desde fantasías, o juegos, o videojuegos, o películas, a la violencia y el AK-47 o la violencia misma en la escuela, es un problema que tenemos que tomar en serio, sociedad y Gobierno. Porque más allá de qué tamaño sea, es un problema que está afectando fuertemente. Es un asunto cualitativo, lo admito; es un asunto difícil de medir, de ponderar, pero hay que prestarle enorme atención; y ahí enfocaría mis cuatro prioridades: combate a la pobreza, educación, salud y, desde luego, formación integral y oportunidades para los jóvenes y adolescentes en la parte social que usted me pregunta.
MODERADOR: Pregunta el ingeniero Miguel de Jesús Avilés Godínez.
ING. MIGUEL DE JESÚS AVILÉS GODÍNEZ: Buenos días, señor Presidente.
Yo cambiaría mi pregunta. Mi pregunta inicial era cómo veía usted el final o cómo veía el futuro del país. Yo la cambiaría por una pregunta acerca de por qué no apoyo a la tecnología, apostar por la ciencia, debido a que países como China, la India, apostaron por estos programas para tener un mejor desarrollo y hemos visto, últimamente, en lo personal, el fuerte impulso que ha tenido, por decir algo, China, con su grupo de ingenieros.
Entonces, mi pregunta sería esa. Por qué se deja de lado la tecnología, el apoyo a la ciencia.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Estoy totalmente de acuerdo con usted en el sentido que debemos apoyarla y, ciertamente, la clave de política pública es, precisamente, el desarrollo. Una clave fundamental de política pública es el desarrollo tecnológico.
El esfuerzo mayor que hemos dado, sobre todo el crecimiento presupuestal, lo hemos orientado, por ahora, por la enorme carencia que teníamos, por la abrumadora demanda que tenemos, a apoyar, sobre todo, a universidades e instituciones de educación superior que tienen, digamos, un perfil de necesidades de gasto que tienen que afrontar.
Tenemos que aumentar mucho más el apoyo tecnológico. Aquí le voy a pedir al Secretario Lujambio que en la mesa correspondiente pueda detallar con ustedes los datos, las cifras que hemos dado, no sólo presupuestalmente, sino, también, los esfuerzos que hacemos, no sólo en instituciones públicas de desarrollo científico, sino, también, en colaboración con el sector privado. El esfuerzo de transferencia de tecnología, que es otro de los objetivos de la atracción de inversión extranjera, por ejemplo, tiene que seguir.
Pero ahí coincido con usted, todavía es un esfuerzo insuficiente, que debe multiplicarse. Y concretamente a su pregunta: Por qué no apostarle más a la tecnología. Estoy totalmente de acuerdo y ojalá podamos generar en esta prioridad que muchos compartimos la suficiente fuerza política para que el crecimiento en el Presupuesto Tecnológico del país, pueda enfrentar y superar la prueba de verse confrontada con una gran multiplicidad de actores políticos, que a la hora de definir el Presupuesto, finalmente, establecen, quizá, otras prioridades.
Pero creo que en la medida que divulguemos, como usted lo hace, la importancia de la tecnología, lo podemos hacer. De todos modos, el esfuerzo que estamos haciendo, también, en la orientación tecnológica del esfuerzo adicional de educación media y superior, va en ese sentido, precisamente.
Por eso yo decía, hace rato, este dato que a mí me parece significativo. Que cada año en México se están graduando 90 mil ingenieros o técnicos en el país, que significa una gran aportación tecnológica también.
MODERADOR: Pregunta el licenciado Óscar Tenopala García.
LIC. ÓSCAR TENOPALA GARCÍA: Señor Presidente. Acabamos de recibir la noticia del Censo General de Población y Vivienda 2010, de que somos un poco más de 112 millones de habitantes; y según comentarios, cuatro millones más de lo que los especialistas esperaban; es decir, hay un fenómeno de crecimiento de la población que seguramente desafía el combate a la pobreza, la reorganización del territorio. En fin.
Qué ha pensado usted respecto al futuro en materia no sólo demográfica, sino de lo que implica depresión de recursos para todo el país.
Gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Sí, fue impactante los datos del Censo, 112 millones de mexicanos y creciendo. Y también llama mucho la atención el desvío, digamos, en la estimación original, casi cuatro millones.
Según estaba yo revisando o le preguntaba cuando estaban saliendo esas cifras, al Director Sojo, una parte de ese error, digamos, de pronóstico, tiene que ver con que hubo menos migración de la esperada. Yo creo que eso obedece a factores múltiples.
Creo que el más importante es la crisis económica en Estados Unidos.
Segundo. Las políticas más restrictivas de migración en Estados Unidos.
Y también, tercero. Es que sí se han generado en México, ustedes pueden decir que es la menor parte, pero el hecho es que también se han generado capacidades de retención de migración, y eso ha generado que esos cuatro millones de personas o una buena parte de ellos que se pensaba que migrarían, se quedaron.
Desde luego que, qué lamentable, la crisis en Estados Unidos y qué indignantes las medidas restrictivas, algunas de ellas indignantes, insisto, que se toman allá contra nuestros migrantes.
Pero, a final de cuentas, yo en mis adentros, digo: Para mí un migrante, una gente que se va, es una familia que pierde a su papá, es un líder de comunidad que ya no tenemos. Es un trabajador, que es el más fuerte, el más bravo, el más audaz, el más arriesgado que perdemos.
Y por eso, a pesar de que me duelen los problemas que tenemos y lo que sufren los migrantes en Estados Unidos y, desde luego, que qué lamentable que nos pasó la crisis económica americana en medio. Yo también digo: qué bueno que se quedaron.
Y vamos a trabajar entre nosotros, y vamos a crear en México las oportunidades aquí, en México, para las familias mexicanas. Ojalá podamos, desde luego, un día revertir totalmente la necesidad de que se vaya la gente.
Yo veo a México así. Habrá un día, desde luego que tomará muchísimo tiempo, pero que si seguimos haciendo de México un país que crezca, que genere oportunidades, que le dé educación a todos los que la busquen, y que le dé salud a todo el que lo necesite. Si seguimos haciendo de nuestro país un país fuerte, si le seguimos construyendo instituciones, si le seguimos dando policías fuertes, gobiernos honestos y perseveramos en la democracia, yo estoy seguro que habrá algún día que esa migración, finalmente, se frenará, si no totalmente, de manera significativa, como se ha frenado en estos años.
Y yo creo que entonces México va a ser un país, probablemente con 140 ó 150 millones de habitantes. Ojalá también trabajemos y sigamos trabajando, por cierto, en la salud reproductiva del país, necesitamos informar mucho más a la población y proveerla, precisamente, de métodos de planeación familiar que hagan eficaz, precisamente, la moderación en el crecimiento demográfico. Ya se ha hecho.
Pero, aunque seamos los que tengamos que ser los mexicanos, somos, finalmente, los miembros de un gran pueblo. Y a mí el ver una cifra mayor de la estimada de población, que sí, como Presidente te preocupas más, sabes que tienes que darle más esfuerzo del que estabas planeando, como dicen en las casas: hay que echarle más agua a los frijoles, digamos; voy a decir, lo que significa más presupuesto, y más escuelas, y más hospitales.
Pero, al mismo tiempo, la verdad, es que la clave es que estemos unidos y la clave es que estemos fuertes. Sí podemos. Y, además, esas familias que se quedan, esos trabajadores que se quedan, le están aportando a la economía del país, le están aportando al liderazgo del país; le están aportando trabajo, empleo, crecimiento económico aquí, en México.
Así que, que se corrija la cifra, qué bueno. Pero trabajemos más si es necesario. Pero no veamos como una fatalidad, o como algo malo el que seamos más.
Yo así creo que ocurre, también, en las familias. A veces un hermano, lo que sea, un hijo, hay que quererlo. Y no es que sea que mientras más mexicanos, mejor, no es la idea, sino todos los mexicanos cuentan, todos los mexicanos cuentan por igual, y tenemos que trabajar entre todos, y así le vamos a seguir. Y bienvenidos esos cuatro millones más, que no estábamos previendo, pero que vamos a trabajar, también, por ellos, y de hecho, estamos trabajando por ellos.
MODERADOR: Ésta será la quinta pregunta. Por la agenda del señor Presidente, salvo lo que él indique, será la última.
Debo comentarles que sus preguntas, algunos de ustedes nos han apuntado su correo electrónico, se responderán, y se buscará la manera de que no quede insatisfecha la pregunta que se le quiere hacer al señor Presidente.
Pregunta el señor Robert Manuel.
C. ROBERT MANUEL: Buenos días, señor Presidente.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Cómo está.
C. ROBERT MANUEL: Soy Embajador de Haití. Mi pregunta es un debate. Después del terremoto de Haití, empezó en el Senado, de hecho lo acusó, que se revierta en México el tema de la presencia de militares y policías en misiones de Naciones Unidas.
Quiero decirle que personalmente he visto el cariño con que los haitianos han recibido, marinos y militares, en su presencia, después del terremoto.
Por ejemplo en la cocina. Dos cocinas comunitarias. Es impresionante. Yo pienso que hay que, y sin meterme directamente, cómo lo ven. México, yo sé que es muy sensible en ese tema, que muchos lo ven como una ocupación.
Pienso que no es así, porque es el Presidente de Haití, el Gobierno de Haití, que pide la presencia de estas tropas. Entonces, el pueblo de Haití y otros pueblos, quieren ver la presencia de México en estas misiones. Es bueno para Haití, y probablemente bueno para México, también, en su deseo, por ejemplo, de tener más presencia en el Caribe, donde le dan más posibilidad de participar en temas que competan a los haitianos al final.
Pero necesitamos la ayuda de América Latina en la reconstrucción de Haití. Pensamos que sería bueno abrir este tema, sensible para México.
Gracias, señor.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Gracias Embajador, por estar aquí, Embajador Manuel.
Primero que nada, un saludo muy respetuoso a todas las Embajadoras y Embajadores que estoy viendo ahora y que no saludé al principio. Les agradezco muchísimo su presencia aquí.
En segundo lugar. Un saludo cariñoso, respetuoso, al hermano pueblo de Haití, que sabemos que sigue sufriendo. Y le quiero decir, Embajador, que cuenta Haití con el pueblo y el Gobierno de México. Y sé que debemos hacer mucho más y trataremos de hacer mucho más para aliviar el sufrimiento del pueblo haitiano.
Ya concretamente el tema que usted pregunta, como, también, muy bien lo señala, es un tema de alta sensibilidad, que es, lo que se llama en la discusión diplomática el envío de tropas o no hacia el extranjero en misiones de pacificación.
El Gobierno mexicano no lo ha hecho porque tenemos un alto sentido, desde luego, de respeto a otros lugares y, también, un alto sentido de pertenencia y del sentido de que nuestras Fuerzas Armadas están aquí para proteger nuestra tierra, nuestro lugar, nuestra soberanía, y porque tiene que ver con un debate muy largo de la vocación pacifista del propio México.
También, entiendo que del otro lado hay una responsabilidad internacional y, precisamente, la vocación pacifista, en la interpretación de muchos países, implica, precisamente, el poder hacer ese tipo de comisiones. Pero, ciertamente, no es la estrategia del Gobierno.
Lo que sí hacemos y hemos hecho es, como en el caso de Haití, enviar gente, no en misiones de fuerza, sino en misiones de auxilio a la población civil, como el caso que usted menciona, que es, precisamente, ir a darle de comer al hambriento, como está escrito.
El hecho de ir a ayudar a la gente, y han ido nuestros soldados, han ido nuestros marinos, han ido nuestros Policías Federales, en labores muy, muy importantes y muy valiosas a Haití, y creo que lo podremos seguir haciendo cuantas veces podamos, hasta poder aliviar a la gente que está sufriendo.
Esa cocina, por cierto, tuvo mucho éxito, según me cuentan. Es más, se quedó allá. Y yo creo que vamos a poder mandar, si es necesario, mandamos otras para ayudar, aunque sea un ratito.
Pero fue una cocina, tú fuiste, verdad, Margarita, a la cocina esa. Una cocina muy alegre, además, porque se daba a la gente, la gente cantaba en la fila, se encariñó con nuestros marinos mexicanos. En fin. Fue algo muy importante.
Tomo su pregunta, Embajador, para comentar otro tema.
Algunas veces se ha comparado lo que nosotros estamos haciendo en materia de seguridad con este tema y se empezaba a comparar, por ejemplo, que estaba el Gobierno, pues para qué pelear una guerra como la de Iraq, y que nuestras tropas era como haberlas mandado a Iraq y que era el mismo problema que tuvo el Gobierno de Estados Unidos, de mandar soldados a Iraq, etcétera.
No, señores. Nosotros no estamos buscando una guerra a miles y miles de kilómetros de aquí. Nosotros no estamos en un enredo de carácter político internacional y diplomático. Nosotros enviamos a nuestros soldados y a nuestros marinos a defender nuestra tierra y la que está en juego son nuestras familias, y es nuestro pueblo al que defendemos.
Y ahí no tenemos ninguna duda. Seguiremos defendiendo con todo al pueblo de México. Y con todo, es con toda la fuerza del Estado. No estamos enviando elementos a luchar a otra parte.
Yo sé que voy tarde, pero, también, como la culpa es mía, me atrasé yo. Así que, vamos a seguirle otro ratito.
MODERADOR: Tomamos más preguntas.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Vamos a hacer esto Luis Felipe. Por qué no agarramos unas dos o tres de una vez, así en serie.
De todos modos les recomiendo que vayan a los Foros con cada uno de los Secretarios y los Gabinetes para las dudas más específicas.
MODERADOR: Pregunta el biólogo José Carlos Martínez Hernández.
BIÓLOGO JOSÉ CARLOS MARTÍNEZ HERNÁNDEZ: Gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Adelante.
BIÓLOGO JOSÉ CARLOS MARTÍNEZ HERNÁNDEZ: Hola. Buenos días.
Mi pregunta va referente al tema de los apoyos que reciben las personas que están en situaciones de pobreza.
Qué estrategia contamos para que este apoyo se vuelvan un financiamiento y generen ingresos y no solamente sean un subsidio que no genere nuevos empleos o actividades entre las personas.
Gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: La otra. Y otra más de una vez, Luis Felipe.
MODERADOR: La química Bertha Guadalupe Rodríguez Sámano.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Bertha. Por dónde está. Acá está.
QUÍMICA BERTHA GUADALUPE RODRÍGUEZ SÁMANO: Buenas tardes, buenos días todavía.
Señor Presidente, buenos días, buenos días todos.
Mi pregunta va encaminada a lo siguiente. Por la actividad que realizo y el lugar donde me desempeño es importante preguntarle si en rescate a la educación pública, como dice mi pregunta, podríamos utilizar todos los bienes y los recursos que se recuperan del narcotráfico y de la delincuencia organizada para apoyar a la educación pública en todo el país.
Gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Gracias a usted.
MODERADOR: La siguiente pregunta es del doctor Héctor Octavio Nava Jaimes.
DR. HÉCTOR OCTAVIO NAVA JAIMES: Muy buenos días, señor Presidente. Buenos días a todos.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: A ver, si me dice por dónde está, don Héctor. Ya lo vi. Perdón. Sí, adelante.
DR. HÉCTOR OCTAVIO NAVA JAIMES: Mi pregunta tiene que ver con algo que ha estado en la discusión recientemente, sobre algo que, en mi opinión, se había retrasado muchísimo en nuestro país: la homologación de las normas internacionales.
Estudios diversos muestran que el 80 por ciento de las barreras técnicas viene por tener normas diferentes, y sistemas de evaluación de la conformidad, que no están basadas en capacidades técnicas probadas.
Mi pregunta es: cómo contrarrestar estos movimientos que se han dado por intereses de grupos cuasimonopólicos, que no permiten el crecimiento de otras instancias de evaluación a conformidad, y la modernización de nuestro sistema de normas en el país, para ser más competitivos, cada día más.
Por su atención, muchas gracias.
PRESIDENTE FELIPE CALDERÓN HINOJOSA: Gracias, doctor.
Primero. La pregunta del financiamiento.
Esto es un punto bien importante, y qué bueno que hace la pregunta. La clave es cómo salir de los programas de combate a la pobreza. Si una persona ya sale de la pobreza, ahora sí que si se queda sin Programa, la persona dice: mejor no me saquen. Mejor me sigo con mi Oportunidades. Ese es parte del problema. Tenemos que evitar que se genere un vínculo de dependencia tal, que la gente prefiera a quedarse a recibir siempre el ingreso.
Y aquí la clave es hacer exactamente lo que usted dice. Son programas del financiamiento ingreso propio. Es decir, que ya no recibes el dinero como un subsidio, sino que, en todo caso, tienes el apoyo para financiar tu propia actividad.
Y aquí es donde entra la enorme labor que se hace, tanto en FONAES, el Fondo Nacional de Empresas Sociales, como en el apoyo a las PyMES que, nuevamente, ha tenido, en esta Administración, un apoyo sin precedentes; estamos apoyando, tan sólo en el Fondo PyME es casi, qué será, tres o cuatro veces. Cuánto es el Fondo PyME. Pero era hace seis años, y hace cuatro años. Es casi cinco veces más, un poco más de cuatro veces más el Fondo PyME.
Y con ello, lo que estamos haciendo, hacemos dos cosas: lo hemos multiplicado por cuatro el Fondo PyME pero, además, hemos cambiado la manera de aplicarlo. Antes se repartía entre los pequeños y los medianos empresarios que se podía y, ahora sí que hasta aquí alcanzó, y como en la tortillería, cuando se acaban las tortillas, se rompe la fila, y se acabó.
Ahora, qué estamos haciendo. En lugar de darlo directamente, lo metemos como garantía, un colateral en el sistema bancario.
Entonces, le decimos al banquero: Mira, si viene un pequeño empresario, microempresario, tú préstale, y no le andes sacando el coche en garantía y la casa. Yo te garantizo su préstamo. Y entonces, los préstamos a pequeños y medianos y micronésimos empresarios se han multiplicado.
Y este tipo de apoyos, ya no tengo las cifras y el último dato que incluía ya financiamiento, no sólo a pequeños empresarios, sino también a productores agrícolas, etcétera; el apoyo era de casi 300 mil unidades económicas en cuatro años.
Pero podemos desglosar PyMES. FONAES es otro sistema que ayuda a amas de casa que quieren hacer mermeladas y salir adelante, o que hacen artesanías. Otra cosa está haciendo FONART, también en ese sentido.
Entonces, son varios programas que financian pequeños negocios: PyMES, FONAES, artesanías, dije FONATUR, pero no es FONATUR, es FONART, por eso odio los acrónimos, esto lo saben muy bien mis colaboradores, FONART; y lo está haciendo, también, el propio ProÁrbol.
ProÁrbol es una manera, ProÁrbol también financia, por ejemplo, plantaciones que se pagan al final, cuando la madera es madura y se explota. O financia, también, el Pago de Servicios Ambientales, que es una manera de que el ejidatario pueda preservar el bosque y utilizarlo, y explotarlo racionalmente.
Dos. Los bienes y recursos para la educación, ya no me acuerdo de la cifra que di, cinco mil y pico de millones que hemos decomisado, ya tienen reglas de aplicación. Y se aplican en tres partes, más o menos.
Una es para mejorar el sistema judicial. Otra es para la salud, sobre todo para prevenir adicciones. Por eso yo decía hace rato que lo que decomisamos al chino lo aplicamos a los Centros Nueva Vida y con eso los construimos. Y la otra, es para mejorar la procuración de justicia, la fuerza misma. Entonces, tiene reglas y se aplican para eso.
Pero, la verdad, doña Blanca, la verdad, le hemos metido muchísimo a educación, muchísimo, yo creo que le estamos metiendo del Gobierno nada más, más de seis por ciento del PIB, más o menos. Es una cantidad enorme.
Y no sólo es para pagar la parte de maestros, sino que estamos haciendo varias cosas. Por ejemplo, se descentralizó la educación a principios de los 90. Eso quiere decir que las escuelas y la educación y las universidades, son responsabilidad de los estados.
Pero, por ejemplo, nos dimos cuenta que a muchas escuelas no le habían metido un centavo en décadas. Escuelas sin baños, sin techos, ahora sí que un niño de cuarto rompió de un balonazo el cristal, y el niño ya es abuelito y sigue el cristal ahí, roto.
Entonces, hicimos un programa en estos dos últimos años y medio, desde el Gobierno Federal, para componer esas escuelas; para poner ese cristal roto, la canasta de básquet que está rota, los baños, poner baños para niñas, también, no sólo para niños, con lo cual hemos modernizado, qué será; unas 33 mil, 33 mil escuelas en tres años. Les hemos metido infraestructura.
Qué otra cosa hemos hecho en educación.
Algo que costó muchísimo, que fue el concurso de maestros; es decir, las plazas en México, las Federales o se vendían, a cuánto la plaza, hay gente que pagaba hasta 250 mil pesos por plaza. Y qué hicimos.
O se les dejaba a la hija y al sobrino. Costó mucho trabajo, hubo la cooperación de los maestros y hoy las plazas se concursan. Se hace un gran concurso nacional y se asignan a los que sacan las mejores calificaciones.
Eso nos va a traer mejoría, estoy seguro, en materia educativa; quizá no ahora, pero va a mejorar.
Tercero. La Prueba Enlace. Ahora estamos examinando a todas las escuelas. Además de los exámenes regulares, ya el papá o la mamá pueden saber cómo anda la escuela de su hijo, en comparación con las de la colonia o con las de la ciudad, o con las del país.
Y cuarto. Estamos, por ejemplo, pagándoles a los maestros en función, también. Les estamos dando un apoyo en función de cuánto hicieron avanzar a su grupo. Estamos pagándole por méritos en mejorar la calidad educativa.
Todavía no avanzamos todo, porque estamos revisando, precisamente, el asunto de Carrera Magisterial, pero vamos por ahí.
Y finalmente, doctor Nava. Sí, yo entiendo su pregunta. Mire, una de las cosas que hemos desregulado, es lo que preguntaba él, que son los parámetros o los estándares internacionales.
Voy a decir, por ejemplo, el teléfono celular, que a lo mejor traen algunos de ustedes, uno que se está haciendo muy famoso, que es el BlackBerry, por ejemplo. Más de la mitad de los BlackBerry de todo el mundo se hacen en México, pero cuando se importaba un BlackBerry ya que se iba y lo importaban para acá, aunque cumpliera con las normas de todo el mundo, aquí había que ponerle su propia norma para poderlo importar, por ejemplo. Lo cual implica un trámite burocrático que dificulta, precisamente, el comercio.
Una computadora, una laptop, por ejemplo, que venga de Japón, de Estados Unidos, de Inglaterra o lo que sea, al entrar a México, no podía entrar hasta que revisáramos que cumplía con nuestros estándares y le poníamos un sello de que cumplía con esos estándares. Es un trámite inútil.
Por qué si un aparato electrónico cumple, una televisión, por ejemplo, cumple con todos los estándares, por qué aquí le ponemos otro.
Nada más para encarecer el trámite, para alargar el tiempo y para perjudicar al cliente. Y por qué razón también, como bien decía el doctor y yo. No faltó que en algunos sectores de la industria se hacía que el Gobierno sacara una regla para certificar aquí lo que ya estaba certificado en el mundo.
Y entonces, el que producía eso aquí, no tuviera competencia o por lo menos le echara, como se dice, arena a las ruedas del competidor. Qué es lo que hicimos este año. Ya quitamos todo eso y homologamos.
Por ejemplo, entre Canadá, Estados Unidos y México, si se cumple con los estándares de Canadá y Estados Unidos, démoslo por cumplido aquí, también, hombre. Y eso qué ha hecho. Ha agilizado el comercio. Los fabricantes en México traen sus insumos más rápido, se brincan un trámite enorme en la aduana; se brincan, también, mordidas. Y con eso agilizamos el comercio. Y yo creo que hay que seguirle por ahí.
Hubo un reclamo de algunos Senadores, ya mejor no digo de qué partidos, porque luego. Dicen: Cómo era posible que hiciera eso, que cómo hacía eso, que por qué no le exigíamos los mexicanos a los productos americanos que allá se reconocieran nuestros estándares y que aquí les impusiéramos nosotros los estándares a ellos.
Sí suena bien padre, hombre, pero la verdad necesitamos que el comercio se agilice y que un fabricante tenga sus insumos a tiempo y que produzcamos más fácil y más barato. Eso es lo que estamos haciendo. Por eso estamos quitando muchos estándares, y lo mismo en aparatos electrónicos, que en medicinas y lo mismo en muchas cosas.
Por qué. El comercio, amigas y amigos, genera competitividad y genera crecimiento, genera empleo. Tenemos muy metida la idea de que en el comercio sólo gana el que le vende más al otro. No, en el comercio ganan los dos, cualquiera que sea el que venda más. El comercio es ampliar los mercados.
México, en plena crisis, redujo sus aranceles del 13 por ciento en promedio, al cinco por ciento en promedio. Y qué pasó. Ustedes lo vieron. No, no se cayó nuestra producción. Creció. No se cayeron nuestras exportaciones. Crecieron. Saben por qué. Porque ahora son más competitivas.
Insisto. México tiene un enorme potencial. Las mexicanas y los mexicanos somos buenos, muy buenos para producir muchas cosas, para hacer muchas cosas. Tengamos más confianza en nosotros mismos. Tengamos más seguridad en nosotros mismos. Tengamos más ambición y más visión del país y del futuro.
México es grande, amigas y amigos. México es fuerte. Lo estamos haciendo más fuerte con más salud, con más educación, con más infraestructura, con más seguridad, también, donde estamos empeñando fuertemente la fuerza del Estado. México lo estamos haciendo fuerte, y con esa fortaleza va a ser cada día más grande.
Ese es nuestro reto.
Y que en la grandeza de México esté, no sólo el orgullo de todos, sino, también, el bienestar de todas las familias mexicanas.
Muchas gracias.
Y los invito a estar ahora con mis compañeros Secretarios.
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