MAURICIO FLORES. GENTE DETRÁS DEL DINERO. LA RAZÓN.
Es probable que Breno Lorenzo Madero Salmerón sea el último en darse cuenta que tiene los días contados la institución que encabeza, Agroasemex, la que alguna vez fuera sólida reaseguradora del Estado mexicano al soportar entidades federales en caso de desastres y cubrir el patrimonio cultural, al tiempo que cobijar agroproductores agobiados por catástrofes climáticas; pero tal vez Madero Salmerón ya se dio cuenta y acepta ser cómplice de una soterrada privatización.
Al final de 2019 —el primer año de Gobierno de Andrés Manuel López Obrador—, Agroasemex incorporó a su capital utilidades de 537 millones de pesos (mdp) que se añadieron a los 1,179 mdp de ejercicios anteriores; pero para noviembre de 2021 cargó pérdidas por 72 mdp y redujo a 869 millones de los beneficios acumulados por años. El deterioro de su capital se detuvo con cargo a los contribuyentes, pues la SHCP aumentó 8 veces la reserva legal al subirla a 1,444 mdp… cifra cercana a los 1,738 millones de pesos que Lorenzo Córdova solicitó para que el INE organice decorosamente la consulta de revocación de mandato en abril próximo.
No en vano corre la versión de que tras dos secretarios de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O considera la desaparición de la reaseguradora luego de que el 22 de octubre de 2021, Agroasemex —con el visto bueno del coordinador de administración y finanzas, Jesús Bañuelos— emitió las bases para registro, venta y disposición final de los bienes muebles de la reaseguradora que van desde vehículos, sillas, equipo de cómputo o escritorios.
Pero ojo: la administración de Agroasemex —en la que participan José Manuel Terrazas y Javier Vázquez— ha sido notablemente deficiente. La cartera crediticia vigente cayó 90.3% en tres años y aumentó 4.4 veces las reservas de obligaciones a cumplir: es decir, menos clientes, y no pagó a quienes adeuda 710 millones de pesos. Y con ello decidieron dejar en la indefensión económica a sus derechohabientes como han denunciado especialistas del INAH, como Naxhelli Ruiz, para proceder ante desastres que afecten el patrimonio nacional.
Ya no se diga si, a su desaparición y con deudas por cubrir, Agroasemex irresponsablemente deja sin cobertura a los productores agropecuarios y a constructoras que de buena fe realizaron trabajos de emergencia durante la temporada de lluvias. Pero Madero Salmerón se sacude responsabilidad y manda decir a sus asegurados que no tiene ni un peso para pagar, que mejor busquen a Conagua para que Germán Martínez Santoyo se haga responsable. Esto huele mal, como a cambio climático sin procesar… y mandatar a las aseguradoras privadas a que medren con el patrimonio público.