NOVEDADES CAMPECHE.
CAMPECHE, Campeche. Es fundamental que las plantas congeladoras de la entidad sigan trabajando para lograr la certificación de buenas prácticas en el manejo del pulpo, ya que cerca del 70 por ciento del producto campechano se procesa en el exterior, dio a conocer el titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura (Sepesca), Raúl Uribe Haydar.
Indicó que no necesariamente ese procesamiento es realizado por manos campechanas, ya que se tiene conocimiento de que tres compañías foráneas lo hacen actualmente.
Reconoció que esto ha sido uno de los limitantes para el comercio exterior, ya que es importante que las plantas congeladoras trabajen para poder exportar a Europa y en particular a España, país que ha sido gran consumidor del pulpo maya.
“Eso, por supuesto, facilita su transportación por vía marítima o aérea, ya que por ejemplo para el pulpo, la presentación del producto para el mercado internacional es fresco enhielado y en la vecina entidad de Yucatán es exportado a Japón, España, Corea e Italia”, indicó.
Expuso que en la actualidad, la infraestructura pesquera y de comercialización debe ser adecuada para exportar el producto, pues se exige a las empresas la obtención de una certificación sanitaria y de calidad, por lo que es recomendable que los industriales realicen mayores esfuerzos para mejorar las plantas de almacenamiento.
COMERCIALIZACIÓN LOCAL
En Campeche, algunos industriales de la pesca lo comercializan en el mercado local, pero también se utiliza la presentación del producto fresco enhielado, el cual es transportado en vehículos terrestres equipados con refrigeración, principalmente hacia el Distrito Federal, Puebla, Guanajuato, Michoacán, Jalisco, Sinaloa y Mexicali.
Uribe Haydar admitió que Yucatán ha sido una puerta importante para la exportación del pulpo de la Península, “pero hay que trabajar en la infraestructura y la capacidad para que Campeche pueda almacenar los excedentes de productos marinos, tal como el pulpo maya”.
Señaló que aunque la temporada de captura del molusco concluye este diciembre, su consumo se da todo el año. No solo se trata de poder vender producto marino fresco en temporada, sino de tener la capacidad para almacenar la producción.
“Creo que todos los empresarios pesqueros tienen el deber de buscar esas oportunidades en materia de infraestructura, porque invertir en la pesca es contribuir a la economía de muchas familias que dependen de la actividad”, expresó.