ANTONIO GARFIO Y MARIBEL ALBA. EL HERALDO DE CHIHUAHUA.
Mercados internacionales presentan problemas por la pandemia.
CUAUHTÉMOC, Chihuahua. “Tenemos cerca de un tercio de la producción de manzana del año pasado aún en almacén, se encuentra detenida a causa de la caída de los mercados de exportación”, señaló Alejandro Bordas, presidente de la Asociación de Manzaneros de Cuauhtémoc, quien informó que el año pasado hubo una producción récord de manzana, con 30 millones de cajas.
Para la cosecha de este año, el presidente de la asociación pronosticó un alto rendimiento de producción, la cual es probable que no supere la del año pasado, pero sí que arroje unos buenos números.
“El año pasado tuvimos una cosecha récord, y por el contingente la cosecha de 2019 está siendo golpeada en ventas, ya que todavía tenemos el inventario en refrigeradores, lo cual nos ha complicado todo el panorama para lo que podamos cosechar el siguiente año”.
Alejandro Bordas aseguró que la baja en las ventas es normal de un año a otro, sobre todo en los periodos posteriores a Semana Santa, pero antes de esa fecha las ventas están por los cielos, y este año no fue el caso.
“Antes de Semana Santa la cosecha se junta en los mercados, se comercializa en los pequeños establecimientos, incluso en la región se puede colocar para su venta, cosa que este año no sucedió”.
Para ello, el campesino aseguró que lo que permanece sin ser colocado para su venta es alrededor de un tercio de producción, la cual, en señalamientos del año pasado, apuntó que fueron cerca de 30 millones de cajas.
“Mientras estén las medidas de fase tres del contingente, y continúe la cuarentena de no salir de casa, las ventas seguirán igual; esperamos que cuando se levante esa restricción todo se normalice completamente”.
Por ello, señaló que espera que una vez que se reactiven sectores como el restaurantero o de comercios menores, la venta de sus productos se verán beneficiados, al circular en los mercados o en las tiendas de servicio, con una mayor demanda.
Se reúnen productores con la Secretaria del Trabajo
En otro tema, los productores de manzana de los municipios de la región Noroeste de Chihuahua, sostuvieron una reunión virtual con Ana Luis Herrera, secretaria del Trabajo y Previsión Social en el Estado, quien dio a conocer las medidas para la contratación de jornaleros para el desahije.
Así lo informó Alejandro Bordas, presidente de la Asociación de Manzaneros de Cuauhtémoc, quien agregó que participaron la Secretaría de Desarrollo Rural y su área de Agricultura de Gobierno del Estado, y presidentes de asociaciones de Guerrero, Bachíniva y Namiquipa, así como el presidente del Consejo Estatal Agropecuario, entre otros.

La temporada de deshoje de la manzana da empleo a alrededor de 15 mil jornaleros, donde otras actividades de la temporada es la colocación de mallas antigranizo. Estas actividades comienzan el próximo mes. Para agosto, la pisca de la manzana da empleo a más de 20 mil jornaleros.
Bordas comentó que desde el año pasado en Cuauhtémoc implementaron productos químicos para el raleo, y este año el Municipio de Guerrero inició con esta actividad.
Este deshoje químico permite quitarle carga a los árboles, lo que es útil para mejorar la calidad y el tamaño de la fruta.
Antes de que el país fuera declarado en fase tres por la contingencia del Covid-19, los productores de manzana habían sostenido una reunión con el Sector Salud donde les hicieron múltiples recomendaciones para el manejo de los jornaleros.
Por su parte, autoridades estatales, en conjunto con fruticultores, han emprendido desde hace meses una serie de acciones encaminadas a proteger a los trabajadores del campo en esta temporada que existe la pandemia, en seguimiento a normas internacionales que buscan, como objetivo final, la mejora de las condiciones de este sector poblacional.
Además de las recomendaciones sanitarias que inciden en toda la población, aquellas empresas que laboren en el ramo agrícola deberán trabajar en coordinación con la jurisdicción de Salud, conformar un equipo de gestión de emergencias que tiene que contar con la capacitación necesaria. Tener un plan de manejo de la contingencia sanitaria, así como contar con un “centinela”, por cada grupo de trabajo, que domine tanto el español como otra lengua dominante en la plantilla laboral y que tenga el contacto directo con quien tome decisiones, a fin de elegir las acciones necesarias en caso de un posible caso.
En los sitios de trabajo tendrán que contar con módulos de supervisión con gel desinfectante, espacio para sanitización de objetos como llaves, celular, mochilas, etcétera, contar con agua y jabón, termómetros, entre otros.
Para el caso de los refugios, estancias y albergues, se ordena suspender cualquier actividad que aglomere a varias personas, reducir el número de personas por habitación, establecer horarios alternados para comidas, baños y otras actividades, tratando de reducir el contacto al máximo.
Éstas son sólo algunas de las instrucciones que por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social se están girando a los productores frutícolas de la región, sin embargo, son muchas restricciones más que deberán seguirse para evitar un eventual contagio o propagación de la enfermedad con la llegada masiva de personas que arriban a Cuauhtémoc en esta temporada.