FORBES MÉXICO.
Con la firma del presidente estadounidense para promulgar este acuerdo, ahora sólo queda pendiente el aval del parlamento candiense al nuevo tratado comercial para América del Norte.

En los jardines de la Casa Blanca, durante su discurso previo a la firma del acuerdo modificatorio México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), señaló que el tratado por fin está terminado, a pesar de que se decía que no se llevaría a cabo.
Y agradeció la colaboración cercana del primer ministro canadiense Justin Trudeau, así como la “increíble amistad y la relación que desarrollada” con López Obrador; mencionando también el trabajo de los embajadores y secretarios involucrados en esta negociación.
Trump también hizo hincapié en que la frontera con México “es la más larga y fuerte, económicamente hablando”, recordando que se construye un muro para detener a los migrantes.
Además, calificó este logro como el acuerdo más grande que alguna vez se consiguiera, justo y moderno que beneficia a su país; y aseguró que servirá para los ganaderos, agricultores e industriales estadounidenses.
Trump promulgó el nuevo acuerdo comercial de América del Norte en una ceremonia en la Casa Blanca a la que asistieron unos 400 invitados, entre quienes no aparecen los demócratas que ayudaron a asegurar la aprobación del pacto en el Congreso.
Los invitados a la promulgación del T-MEC incluyen legisladores de todo el país, trabajadores, agricultores y directores ejecutivos de empresas, así como funcionarios de México y Canadá, dijo un funcionario de la Casa Blanca.
El T-MEC fue firmado en noviembre de 2018, por los presidentes Donald Trump (EU) y Enrique Peña Nieto (México), así como por el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; tras un año de intensas negociaciones.
Fue México, ya en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el primer país en aprobar el nuevo tratado; y a mediados de enero el Senado estadounidense concluyó el proceso legislativo con la aprobación del acuerdo trilateral.
Con información de agencias.