CIUDAD DEL CARMEN, Campeche. Pescadores insistieron en la urgencia de levantar la veda de 11 años impuesta al camarón blanco, ya que no es posible que no hayan concluido el estudio para determinar porqué cuando el crustáceo arriba a la costa y hasta las cinco brazas muere inexorablemente, pero por su captura convierte a los hombres de mar ribereños en pescadores furtivos, perseguidos por elementos de la Tercera Región Naval fuertemente armados.
Los líderes de los pescadores ribereños, Ulises Morales Jiménez y Fermín Arcos Ramos, subrayaron que el ex gobernador más corrupto y ratero que ha tenido Campeche, Jorge Salomón Azar García, junto con un dirigente de la Cámara de la Industria Pesquera en Carmen de apellido Ramírez Tomás, son quienes más daño le han hecho a este sector.
Recordaron que Azar García exigió a la entonces Secretaría de Pesca, hoy Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) que cancelara los permisos para capturar el camarón blanco que arriba a las costas carmelitas, con el argumento de que esa captura le correspondía a la pesca de altura y con las lanchas ribereñas no la podían realizar, sobre todo con redes tipo agalleras, programa instrumentado por el entonces secretario federal, Guillermo Jiménez Morales, en las décadas de los 80’s y 90’s.
Expresaron la necesidad de que el Gobierno Federal atienda la problemática de la pesca en la región, ya que son recursos renovables que pudieran llevarse de manera compartida con la industria petrolera.
“Los pescadores ribereños requieren urgentemente de proyectos de acuicultura, maricultura y ecoturismo, pero también para la pesca de mediana altura necesitan barcos nodrizas porque la captura ya no se puede encontrar de cero a 12 brazas, sino que tienen que incursionar a las 18 ó 20 brazas con una lancha de 25 pies, poniendo en peligro su vida”.
Sostuvieron que el camarón blanco sigue arribando a aguas de las costas que van de las cero a cinco brazas, pero lamentablemente se muere sin ser capturado, si no es así que la Sagarpa nos aclare qué pasa con ese producto, que lógicamente debe morir al cumplir sus ciclos de crecimiento y reproducción.
“Sin embargo, los pescadores ribereños llevamos más de 11 años esperando los resultados de las supuestas investigaciones que realizarían y que al parecer todavía no concluyen”.
Insistieron en que la prolongada veda ha propiciado que los hombres de mar se conviertan en pescadores furtivos, acosados y perseguidos por elementos de la Secretaría de Marina.
Pidieron levantar la prohibición de la captura del camarón blanco y aprovecharlo mediante los permisos correspondientes o en cuotas como se hacía hace años.
“No queremos seguir fuera de la ley, ni explotando al margen de la misma esa producción que brinda el mar”, agregaron.