BRENDA GARZA. EL HORIZONTE.
En Nuevo León, los precios de algunos cortes de carne se disparan hasta 9%, de diciembre pasado a abril de este año.
MONTERREY, Nuevo León. Pese a la crisis del último año, los regios pueden presumir de algo: “no ser codos”, y por el contrario, seguir disfrutando de sus carnitas asadas, aunque ahora esto tenga que costarle un poco más a sus bolsillos.
Y es que, los datos más recientes arrojan que dicho producto, el cual es vital en las cocinas y restaurantes de Nuevo León, reporta un alza importante en su precio de diciembre pasado a abril de este año.
Uno de los cortes de carne que más se ha encarecido es el rib-eye jr que pasó de venderse de $225 a $245 pesos el kilo, es decir, ahora cuesta hasta cerca de un 9% más caro que hace apenas unos meses.
La arrachera no se queda atrás al pasar de $310 pesos en diciembre a $325 pesos en abril y el sirlon de $250 a $265 pesos, en igual comparativa.
Para el caso de los restauranteros de la entidad- que tienen en la carne a uno de sus principales insumos- la situación también se ha tornado complicada, reveló Jorge Moeller, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados(Canirac) Nuevo León.
“Hace un año el rib eye prime costaba a $360 el kilo, y ahora $879 pesos”, señaló el líder de los restauranteros en la entidad.
Por su parte, Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes(ANPEC) comentó que “lo que está pasando ahora de diciembre a abril en el tema de los cárnicos y de toda la canasta, es una inflación que se les está yendo de las manos”.
Agregó que “en el tema de las carnes, el incremento ha sido en la carne para asar y la carne de diario como la milanesa o la pulpa negra”.
Explicó que esto se debe a la sequía prolongada, lo que influye directamente en el tema de los granos y todo lo que se refiere a dar alimento al ganado.
“Es decir, se ha encarecido el maíz, el amarillo, el de alimento de animales y su precio se ha encarecido porque no hay producción de granos, se necesita sorgo, soya, maíz, además de un conjunto de insumos para darle una correcta alimentación a los animales.
Al haber sequía estos granos ya no están al alcance, ya no son tan asequibles o se han encarecido y esto impacta en el precio de las carnes”, comentó en entrevista con El Horizonte.